El dólar realizaba una pausa el lunes luego de tres semanas consecutivas de avances por una toma de ganancias de los inversores antes de elecciones de mitad de mandato en Estados Unidos esta semana que podrían provocar volatilidad para los mercados globales.
La confianza de los inversores en la zona euro cayó más de lo previsto en noviembre y tocó su nivel más bajo en poco más de dos años, mostró un sondeo publicado el lunes, afectada por las preocupaciones sobre las políticas comerciales de Estados Unidos y el futuro de la industria automotriz.
Los mercados bursátiles subían el viernes por la esperanza de que Estados Unidos y China estén empezando a reparar sus relaciones comerciales.
El dólar alcanzó el miércoles un récord en 16 meses frente a una canasta de monedas, respaldado en la fortaleza económica de Estados Unidos.
Los mercados de acciones se recuperaban el miércoles, lo que generaba algo de alivio después de un octubre brutal en que las acciones sufrieron una de sus peores caídas en una década y afectaron a la confianza de los inversores.
Los préstamos dudosos, los delitos cibernéticos y el Brexit se encuentran entre los mayores riesgos a los que se enfrentan los prestamistas de la zona euro en 2019, dijo el martes el Banco Central Europeo (BCE), estableciendo sus prioridades de supervisión para el próximo año.
Las acciones europeas caían el martes en una sesión volátil y el yuan chino tocó un mínimo de 10 años, debido a que la perspectiva de otra escalda en la guerra comercial entre China y Estados Unidos empeoraba el pesimismo reciente en los mercados globales.
La preocupación por la desaceleración de la economía china afectó los futuros de las acciones estadounidenses y mantenía a las acciones mundiales bajo presión el lunes, aunque los títulos europeos subían gracias a los informes de ganancias alentadores y el alivio de que Italia evitó una baja.
Las bolsas globales operaban a la baja el viernes, camino a su peor semana en más de cinco años, porque la ansiedad por las ganancias corporativas acrecentaba la preocupación por el comercio global y por el crecimiento económico.
Las bolsas europeas mostraban un tímido repunte el jueves, luego de que en la víspera Wall Street tuvo su peor jornada desde 2011 y de que las fuertes pérdidas en Asia dejaron a las acciones globales camino a su peor mes desde la crisis financiera.
El dólar bajó el 1,18% este lunes en Brasil en consonancia con el optimismo reinante entre inversores en línea con el favoritismo del candidato conservador Jair Bolsonaro, del Partido Social Liberal.
El jefe del banco central de Alemania dijo que los líderes financieros globales tienen que reformar el orden comercial mundial para proteger mejor la propiedad intelectual y hacer frente a las distorsiones provocadas por los subsidios.
Altos cargos de la Unión Europea creen que Italia corre el riesgo de afrontar una enorme tarea de reestructuración de su deuda, que afectaría sobre todo a sus ciudadanos, a menos que recule en su desafío a las normas presupuestarias de Bruselas.
El euro cayó el viernes a su nivel más bajo en dos semanas, mientras que los rendimientos de los bonos italianos alcanzaron un máximo en tres semanas después de que el Gobierno acordó establecer un objetivo de déficit presupuestario más alto de lo esperado.
Las acciones de Wall Street cayeron por una ola de incertidumbre sobre el futuro del vice fiscal general de Estados Unidos, Rod Rosenstein, quien supervisa la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la participación de Rusia en la elección presidencial de 2016.
Las bolsas europeas subían con fuerza en la apertura del viernes, continuando con las ganancias de la sesión previa, después de que la disminuación de los temores sobre el impacto de la guerra comercial ayudaran a Wall Street a alcanzar niveles récord.
Los mercados bursátiles mundiales escalaron, en una sesión donde el Promedio Dow Jones y el índice S&P 500 alcanzaron máximos históricos, mientras que el dólar bajó ya que los inversores vieron la nueva ronda de aranceles impuestos entre Estados Unidos y China como menos severa que lo temido.
A partir del próximo año, el Banco Central Europeo necesitará comunicar la senda esperada de las tasas de interés, más allá de la primera alza, para mantener los precios de mercados consistentes con una lenta aceleración de la inflación, dijo el jueves el economista jefe del organismo, Peter Praet.
El panorama financiero de las principales economías luce mejor para la próxima semana ante esperanzas de nuevas conversaciones de Estados Unidos y China que podrían aquietar la guerra comercial entre ambos países.
El dólar se apreció el martes contra una cesta de seis monedas, ya que las crecientes preocupaciones por las fricciones comerciales entre China y Estados Unidos llevaban a los inversores a buscar refugio en el billete verde.
