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Más de 50 columnas rojas serán el primer añadido a plaza de Tiananmen en 30 años
Pekín, (EFE).- Las 56 columnas rojas instaladas en la plaza pequinesa de Tiananmen con ocasión del 60 aniversario de la República Popular China serán "muy probablemente" el primer añadido a la simbólica explanada desde 1976.
Así lo declara hoy en el diario "South China Morning Post" uno de los directores del desfile del pasado 1 de octubre, Chen Wei, quien consideró que las columnas, que simbolizan las 56 etnias de China, "muy probablemente se quedarán en Tiananmen para siempre".
El último añadido a la plaza fue el Mausoleo que en su centro guarda el cuerpo embalsamado de Mao Zedong, construido en 1976, año del fallecimiento del Gran Timonel, y visitado cada día por cientos de nostálgicos.
Las nuevas columnas de la plaza, visitada estos días de vacaciones nacionales por millones de turistas chinos, tienen cada una un dibujo de una de las etnias del país (tibetanos, uigures, mongoles, han, etc), y el 1 de octubre sirvieron como lanzaderas de fuegos artificiales en la gala nocturna por el 60 aniversario.
Cada columna roja mide 13.6 metros, pesa 26 toneladas y en su exterior está cubierta de plástico reforzado con fibra de vidrio.
La plaza encierra un fuerte simbolismo para los chinos, por haber sido la zona escenario de la revolución que acabaron con el imperio en 1911, de la fundación del régimen en 1949 y también de protestas estudiantiles en muchos años, incluidas las más conocidas de 1976 y 1989.
Incluso construir cerca de la plaza suele estar envuelto en polémica, y claro ejemplo de ello fue la erección esta década, a unos cientos de metros de allí, del Teatro Nacional (apodado "El Huevo"), una vanguardista obra del arquitecto francés Paul Andreu que no todos los líderes comunistas aprobaron.
Por ello, las críticas ya han surgido ante la posibilidad de que las columnas se queden, pese a que la cuestión no se haya confirmado.
Tian Lu, aficionado al arte del "feng shui" citado por el diario, aseguró que las columnas romperán la armonía que existe entre el vacío de la plaza y la puerta roja de Tiananmen, entrada a la Ciudad Prohibida, en su extremo norte.
"La plaza es yin y la puerta es yang. En la plaza se honra a los muertos, en la puerta están los líderes vivos. Las columnas rojas enfermarán a China", vaticinó.
tensy
