Internacional - Política

Votos en favor de la paz en un acto religioso con Moratinos como invitado

2010-02-09

La misa, oficiada por el cardenal Nasrala Sfeir, patriarca maronita de Antioquía y de todo...

Beirut, (EFE).- La Iglesia maronita del Líbano hizo hoy votos en favor de la paz en un acto religioso al que asistieron las más altas representaciones del Estado y que tuvo como invitado de honor al ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

El acto se desarrolló en la catedral maronita de San Jorge, en el centro de Beirut, pegada a una mezquita levantada por el ex primer ministro asesinado en el 2005, Rafic Hariri, padre del actual jefe del Gobierno libanés, Saad Hariri.

La misa, oficiada por el cardenal Nasrala Sfeir, patriarca maronita de Antioquía y de todo el Oriente, con sede en el Líbano, es una de las pocas ocasiones en las que coinciden cada año en un mismo lugar el presidente libanés, el primer ministro y el presidente del Parlamento.

El jefe del Estado, Michel Suleiman, estuvo sentado en la catedral entre el jefe del gobierno y el presidente del Parlamento, Nabih Berri. Al otro lado del pasillo central, a la misma altura, se encontraba Moratinos, y a su espalda el cuerpo diplomático.

El patriarca maronita, en la homilía del oficio religioso, recordó las obras de San Marón, del que se cumple hoy el aniversario de su muerte, en el año 410, y que se ha convertido en el Patrón del Líbano.

"Ojalá que San Marón nos conceda días mejores de los que hemos vivido y celebremos muchas fiestas llenas de bien y de paz", afirmó el jefe de la Iglesia maronita en la homilía, casi exclusivamente de contenido religioso.

Frente al altar se encontraban Suleiman, maronita (católico oriental), Hariri, suní, y Berri, chií. También había, más atrás, representantes del Gobierno, del Parlamento, de las Fuerzas Armadas y de la Justicia, de todos los credos religiosos.

El oficio se desarrolló en medio de medidas especiales de seguridad, con la policía acordonando las cercanías del templo. Dentro de la catedral, sin embargo, los únicos uniformados eran los militares invitados y los Scouts Maronitas que ordenaban a los cerca de 2,000 fieles y representantes de otros cultos.

La Iglesia Maronita fue fundada por un monje ermitaño, luego convertido en San Marón, que nació en la región de Antioquía, en la actual Siria.

Sigue obediente al Papa, aunque mantiene sus propios ritos religiosos y sus estructuras, encabezadas ahora por el patriarca Sfeir.

Cerca del 40 por ciento de los libaneses son cristianos, y entre ellos la maronita fue en su día la comunidad mas numerosa, si bien en la actualidad la mayoría de los libaneses son musulmanes.

La Constitución del Líbano, heredada de la colonización francesa, fija que el jefe de Estado debe ser maronita, el primer ministro musulmán suní y el presidente del Parlamento musulmán chií.



EEM

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