Derechos Humanos

Brasil analiza endurecer posición frente a Irán sobre DH, afirma prensa

2010-02-13

Esta postura se contrapone a la reciente abstención brasileña de condenar las...

Sao Paulo, (EFE).- El Gobierno brasileño, pese a rechazar las sanciones que Estados Unidos impulsa contra Irán, pretende endurecer su posición frente a Teherán en el tema de los derechos humanos, afirmó hoy la prensa local.

Para "confirmar su posición de mediador" en la crisis que Irán afronta frente a Estados Unidos y gran parte de la comunidad internacional opuesta al programa nuclear iraní, Brasil busca una estrategia de presión en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, afirmó el diario Folha de Sao Paulo.

El periódico de mayor circulación nacional indicó que el primer paso lo dará el lunes la embajadora ante el Consejo de la ONU en Ginebra, María Azevedo, quien se pronunciará sobre las detenciones políticas practicadas por el Gobierno del presidente Mahmud Ahmadineyad.

Esta postura se contrapone a la reciente abstención brasileña de condenar las violaciones a los derechos humanos en Irán denunciadas ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Según el rotativo, la posición será transmitida personalmente por el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva en su visita a Ahmadineyad, prevista para mayo.

El diario O Estado de Sao Paulo comenta al respecto que el cambio de actitud obedece a las críticas locales e internacionales que recibió Lula en su encuentro de noviembre pasado con Ahmadineyad, en Brasilia.

La subsecretaria de Asuntos Políticos de la cancillería brasileña, Vera Machado, pidió esta semana una audiencia con el embajador iraní en Brasilia, Mohsen Shaterza, a quien le transmitió su preocupación por la detención de siete activistas de la religión minoritaria bahai, acusados de espionaje.

Esta semana, el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, dijo que no tiene conocimiento oficial de que efectivamente Irán pueda enriquecer uranio al 80%, como anunció el Gobierno iraní, pero afirmó que eso es algo que "lamentaría".

El canciller brasileño reconoció que de enriquecer uranio al 80%, el programa nuclear iraní ya "estaría en violación del Tratado de No Proliferación Nuclear", por lo que Brasil "tendría que evaluar" si cambiar su postura y posicionarse a favor de aplicar sanciones.

"El gran problema en esta cuestión es la confianza. Cualquier acción, especialmente de Irán, puede generar desconfianza. Preferiríamos que no hubiese iniciado el enriquecimiento al 20%, pero no creo que eso cierre las puertas de la negociación", agregó el canciller.

La comunidad internacional teme que el programa nuclear iraní, que Teherán insiste en que tiene exclusivamente fines pacíficos, pueda esconder planes para hacerse con armas atómicas, para lo que se requeriría uranio enriquecido al 90%.



EEM