Internacional - Política
El Dalai Lama rechaza los llamados a reconsiderar su retirada de la política
Dharamsala, (AFP) - El Dalai Lama desestimó este jueves las peticiones del parlamento tibetano para que renconsidere la decisión de abandonar sus funciones políticas en el seno del movimiento tibetano.
El Dalai Lama, de 75 años, anunció la semana pasada su intención de renunciar a su papel político de jefe del movimiento de los tibetanos en exilio, esencialmente simbólico, y de transmitir sus responsabilidades oficiales a un nuevo primer ministro con poderes ampliados.
En un debate histórico en el parlamento tibetano en exilio el martes, la mayoría de la asamblea compuesta de 47 miembros se opuso a esta decisión, haciéndose eco de gran parte de la opinión pública tibetana que estima que su lucha podría debilitarse.
Interrogado sobre un posible cambio de parecer, el Premio Nobel de la Paz declaró a la AFP durante un encuentro con periodistas: "No. Lo estuve pensando durante muchos años (...), mi decisión a largo plazo es la mejor".
"Su Santidad" con la eterna túnica color azafrán recibía a un pequeño grupo de periodistas en su residencia de Dharamsala, en el norte de la India, donde encontró refugio después de huir de China en 1959.
Su retiro político debe ser aprobado primero por el parlamento pero esto podría llevar semanas debido a diversas posiciones conflictivas de algunos parlamentarios.
Sin ninguna responsabilidad política, el Dalai Lama tendría "más tiempo para dar conferencias y viajar a diversos lugares del mundo", tal como espera.
El domingo, unos 85,000 exiliados de 13 países votarán para elegir un nuevo primer ministro que podría asumir mayores responsabilidades, tal como lo desea el Dalai Lama.
El gobierno de Pekín, que lo aborrece, ve en él a un peligroso separatista.
El Dalai Lama defiende una estrategia conciliadora frenta a China, un vía media que propone una simple "autonomía cultural".
En una carta leída el lunes a los parlamentarios, advirtió contra una postergación de la decisión de la asamblea, estimando que podría significar "un desafío aplastante" para el futuro de su movimiento.
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