Nacional - Seguridad y Justicia

Peña Nieto anuncia plan de seguridad en México

2012-12-18

El secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, presentó un primer...

E. EDUARDO CASTILLO y MICHAEL WEISSENSTEIN, AP

MEXICO (AP) — El gobierno del presidente Enrique Peña Nieto adelantó el lunes las principales líneas de su plan de seguridad que tendrá un enfoque regional, en medio de una dura crítica a la estrategia implementada por la administración anterior a la que señaló de no haber logrado disminuir el delito y provocar una fragmentación de grupos criminales que los hizo más peligrosos.

Al encabezar una reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, que integra a los gobernadores y funcionarios federales, el presidente dijo que su estrategia partirá de seis líneas de acción, entre ellas dividir el país en cinco regiones en las que se aplicarán operativos específicos , crear una gendarmería con 10.000 efectivos de manera inicial, formar 15 unidades de Policía Federal para combatir el secuestro y la extorsión, además de destinar millonarios recursos para un programa de prevención del delito.

El mandatario dijo que los objetivos de su estrategia serán reducir la violencia y recuperar la paz y tranquilidad. Su gobierno se enfocará particularmente en reducir los homicidios, secuestros y extorsiones, aunque no identificó cuáles serán esas cinco regiones.

Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional, asumió la presidencia el 1 de diciembre.

Su antecesor Felipe Calderón, militante del conservador Partido Acción Nacional, hizo del combate al crimen organizado una de sus prioridades basado en parte en el despliegue inédito de miles de soldados y en la captura de capos del narcotráfico.

Peña Nieto se había comprometido desde antes de tomar el poder en ajustar la estrategia de seguridad de Calderón que se enfocará menos en la captura de capos y más en la reducción de los delitos que más afectan a la gente como los homicidios y los secuestros.

Alejando Hope, experto en seguridad y ex funcionario de la agencia de inteligencia mexicana, dijo a The Associated Press que si bien se nota un cambio de tono en el nuevo gobierno, no se observa una ruptura como tal con la estrategia de Calderón.

Hope mencionó que, por ejemplo, el gobierno de Peña Nieto mantendrá por ahora las fuerzas armadas en labores de seguridad, continuará con operativos federales y se analizará la posibilidad de tener un mando único de policía en los estados. Las tres cosas vienen desde Calderón.

"Yo veo muchas líneas de continuidad a pesar de la crítica implícita y explícita que se hizo", comentó.

El secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, presentó un primer diagnóstico sobre la situación de seguridad y dijo que lo primero era reconocer que "existe un gran problema".

Sin mencionar específicamente al gobierno de Calderón, Osorio dijo que la captura y muerte de líderes del narcotráfico y el crimen organizado provocó la fragmentación de esos grupos, "que hoy operan con una lógica distinta: pasamos de un esquema de liderazgos verticales a uno horizontal que los hace más violentos y mucho más peligrosos".

Calderón destacó hasta el final de su mandato que uno de sus principales logros fue el haber detenido o dado muerte a 25 de los 37 líderes más buscados.

Osorio también criticó que si bien aumentaron los recursos en materia de seguridad en los últimos años, "desafortunadamente también se incrementaron los delitos".

El funcionario, que en el nuevo gobierno será el responsable tanto de la política interior como de la seguridad pública del país, aseguró que entre 2006 y 2012 el secuestro se incrementó un 83%, el robo con violencia un 65%, la extorsión un 40%, los delito sexuales 16% y el robo en carretera más de 100%.

"En los últimos años, producto de la violencia relacionada al crimen organizado, han muerto miles de personas y también se encuentran miles de desaparecidos", añadió.

Osorio no mencionó en su discurso público ninguna cifra específica, pero en una versión escrita entregada a reporteros aparece que el funcionario preveía decir que habían muerto cerca de 70.000 personas y hay al menos de 9.000 cuerpos sin identificar. Los números aparecen tachados en el texto dado a la prensa.

Las autoridades no mencionaron porqué se decidió al final no mencionar la cifra.

El gobierno de Calderón dejó de contabilizar los asesinatos atribuidos al crimen organizado y el último dato disponible señaló que sólo de diciembre de 2006 a septiembre de 2011 la cifra ascendió a poco más de 47.500.

El número de los delitos atribuidos al crimen organizado han sido un punto de disputa entre las autoridades y sus críticos.

En agosto, en la anterior sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, Calderón dijo que los homicidios ligados al crimen organizado habían caído 15% a nivel nacional en el primer semestre del 2012, sin dar números específicos.

Sin embargo, en una respuesta a una solicitud de información de la AP, el gobierno mexicano señaló que Calderón basó su declaración en cifras que mostraban una reducción de 15% en todos los homicidios dolosos en sólo seis estados con alta presencia del crimen organizado: Chihuahua, Tamaulipas, Baja California, Sinaloa, Zacatecas y Coahuila.

En la reunión del lunes, Peña Nieto dijo estar convencido "de que estamos iniciando un nuevo camino, una nueva ruta y una nueva forma de atender la seguridad para los mexicanos".

A nombre de los 31 gobernadores y el alcalde capitalino, el gobernador del estado norteño de Chihuahua, César Duarte, avaló las líneas definidas por el gobierno.

Dijo que, por ejemplo, es positivo regionalizar la estrategia y no intentar aplicar "de manera generalizada" planes que no necesariamente coinciden con las realidades locales.



KC