Ecología y Contaminación

El cambio climático, una prioridad de la cumbre anual EU-China

2013-07-12

Obama, durante la cumbre con su homólogo chino en California, sostuvo que el ciberespionaje...

EVA SAIZ, El País

La lucha contra el cambio climático y la seguridad en Internet son los dos temas principales que han centrado la agenda de la quinta cumbre anual entre Estados Unidos y China, que concluye este jueves en Washington. El desencuentro en materia de ciberespionaje, donde a las denuncias de EE UU se ha sumado la indignación de Pekín por los programas de vigilancia a instituciones chinas filtrados por Edward Snowden, ha planeado sobre el encuentro del que, no obstante, ambas potencias han arrancado compromisos para paliar los efectos del calentamiento global.

"¿Cómo podemos podemos paliar los efectos del cambio climático? ¿Cómo podemos liderar el desarrollo de nueva tecnología en materia energética, que es, de hecho, la solución al problema?", señaló el secretario de Estado, John Kerry, durante su discurso inaugural de este miércoles. Las palabras de Kerry se enmarcan en la nueva estrategia para la defensa del medio ambiente que el presidente de EE UU, Barack Obama, presentó el mes pasado, y que prioriza el recorte en las emisiones de CO2 y la eficiencia energética.

En esta línea han ido los acuerdos sobre cambio climático a los que ambas delegaciones han llegado en esta cumbre. De acuerdo con la información proporcionada por el Departamento de Estado, los dos países, los máximos emisores de dióxido de carbono, han pactado reducir las emisiones de los vehículos pesados, incrementar la captura, uso y almacenamiento de CO2 (CCUS), incrementar la eficiencia energética de los edificios, la industria y el transporte, mejorar la recopilación de datos sobre los gases de efecto invernadero y promover las redes energéticas efectivas.

Hasta ahora, China se había mostrado reticente a adoptar medidas para reducir el grado de contaminación de su país, con la excusa de que ralentizaría su crecimiento económico, una actitud que parece haber cambiado tras la llegada al poder de Xi Jinping. Hace un mes, en la cumbre que el líder chino mantuvo con Obama en California, ambos dirigentes acordaron reducir la producción y el consumo de los hidrofluorocarbonos.

Si el entendimiento para combatir el cambio climático ha sido palpable, la divergencia en torno a la ciberseguridad es tan formidable que ambos países acordaron tratar el tema en una comisión independiente para evitar poner en riesgo el éxito del resto de los asuntos objeto de la reunión. En la sesión inaugural, el vicepresidente Joe Biden reiteró las acusaciones de EE UU hacia el Gobierno de Pekín sobre el robo informático de datos a las empresas de este país por parte del Ejército chino, unas prácticas que han costado a la economía estadounidense pérdidas de 320.000 millones anuales. China contraatacó recordando las informaciones filtradas por Snowden sobre el espionaje del Gobierno estadounidense a instituciones chinas.

Obama, durante la cumbre con su homólogo chino en California, sostuvo que el ciberespionaje es menos corrosivo y perjudicial que el ciberrobo que practica Pekín. "Nosotros no hacemos eso y ningún país debería hacerlo", aseguró el presidente de EE UU. Aunque China no comparte esa opinión, la delegación estadounidense considera un avance importante el hecho de que esta sea la primera cumbre en la que Pekín accede a tratar el asunto de la ciberseguridad.

Además de el cambio climático y el espionaje a través de Internet, otras materias estratégicas en la relación política y económica de ambos países como Corea del Norte, la proliferación nuclear, las barreras regulatorias a la exportación o la devaluación artificial del yuan, también se han debatido a lo largo de las dos jornadas de este diálogo bilateral.

En las reuniones han intervenido 14 agencias de EE UU y 16 de China, lideradas respectivamente por el secretario Kerry y el secretario del Tesoro, Jack Lew, y por consejero de Estado, Yang Jiechi, y el vice Premier, Wang Yang. Para los cuatro esta es su primera cumbre, ya que todos han accedido a sus respectivos cargos este mismo año. Biden hizo notar esta circunstancia y la importancia de que llegaran a conocerse mejor. "Es importante que los cuatro profundicen en su relación y que esta se haga más personal", señaló el vicepresidente.

Los acuerdos y divergencias evidenciados en la cumbre demuestran lo complicada y trascendental que es la relación bilateral entre ambas potencias de cara a garantizar un equilibrio a nivel mundial en materia política, económica y de seguridad.



KC