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Gobernador convoca a Guardia Nacional tras disturbios en Ferguson

2014-08-18

Su decisión de llamar a los soldados que sirven como reservistas del Ejército busca...

Washington, (dpa) - Tras los nuevos disturbios registrados en la noche del domingo en la localidad de Ferguson, en el estado de Missouri, por la muerte del joven Michael Brown a manos de la policía, el gobernador Jay Nixon ordenó hoy a la Guardia Nacional que se despliegue en el suburbio de las afueras de St. Louis.

Los soldados deben ayudar a la policía a "restablecer la tranquilidad y el orden", dijo Nixon.

"Tenemos soldados bien entrenados y experimentados", señaló por su parte el general Greg Mason luego de que la Guardia Nacional llegara a Ferguson, donde el 9 de agosto la policía mató a Michael Brown, un joven afroamericano desarmado.

Por su parte, el presidente estadounidense, Barack Obama, anunció hoy que el miércoles el fiscal general Eric Holder visitará Ferguson, para evaluar la situación en el lugar.

Obama llamó a los manifestantes a mantener la calma y afirmó que una pequeña minoría estaba usando la muerte de Brown para cometer actos violentos.

"Si bien entiendo las pasiones y la ira que genera la muerte de Michael Brown, ceder ante esa ira saqueando y portando armas e incluso atacando a la policía sólo sirve para generar tensiones y provocar caos. Mina la justicia más que hacerla avanzar", indicó en la Casa Blanca.

Acerca de la policía, que fue duramente criticada por su accionar, dijo Obama: "No hay disculpa para la violencia desproporcionada de la policía".

Obama interrumpió sus vacaciones en la isla de Martha's Vineyard (Massachusetts) para regresar a Washington, donde se reunió con miembros de su gabinete para analizar la situación en Irak y los disturbios en Ferguson.

Asimismo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió moderación y respeto por los derechos de los manifestantes y periodistas en Ferguson.

"El secretario general llama a las autoridades a asegurar que los derechos de reunirse pacíficamente y la libertad de expresión estén protegidos", dijo Stephane Dujarric, portavoz de Ban.

"Llama a todos a practicar la moderación y a las fuerzas de seguridad a atenerse a los estándares estadounidenses e internacionales a la hora de enfrentarse con manifestantes", añadió.

Antes del inicio del toque de queda nocturno que regía en la ciudad, manifestantes dispararon y lanzaron el domingo cócteles molotov contra los agentes, señaló el portavoz policial Ron Johnson esta mañana en la CNN. También hubo saqueos. La policía usó gas lacrimógeno para disolver la manifestación.

Para la noche de hoy fue levantado el toque de queda. En cambio, las escuelas permanecieron cerradas y serán reabiertas sólo cuando las calles sean seguras, dijo Jana Shortt, del distrito escolar Ferguson-Florissant.

Nixon sostuvo que "numerosos individuos organizados y en aumento, muchos de fuera de la comunidad y el estado" se están organizando para perpetrar "actos criminales violentos" que ponen en peligro a los residentes y empresarios de Ferguson.

El gobernador condenó los ataques, que según dijo incluyeron el intento coordinado de bloquear carreteras. Su decisión de llamar a los soldados que sirven como reservistas del Ejército busca restaurar la paz y el orden en vista "de estos ataques deliberados, coordinados y crecientemente violentos contra la vida y la propiedad".

Los disturbios surgieron tras la muerte el 9 de agosto de Brown, de 18 años, a quien le disparó Darren Wilson, un policía blanco con seis años de experiencia. Desde entonces ha habido en Ferguson protestas violentas casi a diario.

La policía señaló que paró al joven y se produjo una refriega, pero testigos contradicen esta versión y dicen que Brown iba desarmado y con las manos en alto en señal de rendición.

Un informe de una autopsia privada confirmó que el joven recibió al menos seis disparos, informó el abogado de la familia de Brown.

El abogado Benjamin Crump explicó en rueda de prensa que la autopsia preliminar confirma que Brown recibió múltiples disparos.

Crump considera que los resultados preliminares de la autopsia muestran que hay motivos suficientes para que el policía que disparó a Brown, Wilson, sea arrestado.

Un segundo análisis realizado el domingo por Michael Baden, ex jefe de forenses de la ciudad de Nueva York, revela que una de las balas impactó en la parte superior del cráneo, lo que en su opinión sugiere que la cabeza del joven estaba inclinada hacia adelante cuando lo alcanzó el proyectil, que causó una herida mortal. En total recibió seis disparos, dos en la cabeza y cuatro en el brazo derecho. Todos se hicieron de frente.

La autopsia preliminar, sin embargo, no precisa a cuánta distancia se encontraba el agente Wilson cuando disparó a Brown.

De momento, no se han difundido los resultados de la autopsia oficial.

También generaron revuelo las imágenes divulgadas el viernes por la policía sobre un robo en el que presuntamente habría participado Brown antes del mortal tiroteo. Más tarde se aclaró sin embargo que el policía no sabía nada de este incidente cuando le disparó. El cuerpo de seguridad se negó además durante días a dar el nombre del agente implicado.



ROW

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