Volver a la clase media es un gran golpe: Eike Batista

Río de Janeiro, 17 sep (dpa) - El ex magnate brasileño Eike Batista rompió por primera vez el silencio en que se sumió durante casi un año, y admitió que supuso "un golpe gigantesco" volver a la "clase media" tras la debacle de su llamado "Imperio X", cuyo valor era estimado por la revista "Forbes" en 2011 en 30.000 millones de dólares.

"Nací en la clase media, y volver a serlo es un golpe gigantesco para la familia", expresó el empresario, en una entrevista que publica hoy el diario brasileño "Folha de Sao Paulo" en su edición electrónica.

La entrevista fue publicada un día después de que la Justicia brasileña ordenara embargar todo el dinero depositado en cuentas bancarias de Batista, atendiendo a un pedido del Ministerio Público, que acusa el empresario de haber negociado acciones en base a informaciones privilegiadas y de haber manipulado así el mercado financiero.

Batista negó que haya manipulado el mercado financiero, y sostuvo que lo único que le queda ahora -tras haber transferido a sus hijos los inmuebles que poseía- son las acciones de las empresas Ogpar, OSX y MMX, de las cuales sigue siendo el socio controlador.

Además, mantiene en su poder algunas acciones de las empresas Prumo (ex LLX, vendida al grupo estadounidense EIG) y Eneva (ex MPX, vendida al grupo E.On de Alemania).

El empresario dijo que apuesta a una futura apreciación en los precios de los papeles de esas empresas, lo que le permitiría acumular capital para pagar todas sus deudas.

"Mi cuenta es negativa en 1.000 millones de dólares. Pero esas acciones se van a apreciar. Si una de esas empresas se aprecia en tres veces, esa deuda bajará a 500 millones, luego a 200 millones. Y si todas se aprecian volveré a tener un saldo positivo", explicó.

Además de los problemas financieros, Batista enfrenta la amenaza de juicio por supuesta manipulación de mercado y uso de información privilegiada en beneficio propio, un delito castigado con hasta 13 años de cárcel.

Según las investigaciones del Ministerio Público, el ex magnate habría obtenido información de que las reservas de su petrolera OGX -que cambió el nombre para OGPar después de pasar por un proceso de recuperación judicial a raíz de las millonarias pérdidas- no tenían el volumen inicialmente estimado de reservas.

La Fiscalía sostuvo que Batista no comunicó de inmediato esta información a la Comisión de Valores Mobiliarios (CVM), lo que hubiera hecho que el valor de las acciones se desplomara, sino que lo hizo meses después.

En el intervalo, el empresario habría manipulado precios y realizado venta de acciones basándose en informes positivos -y falsos- sobre su petrolera.

En la entrevista a "Folha de Sao Paulo", Batista admitió que vendió acciones de OGX antes de informar al mercado sobre los graves problemas de la petrolera, pero sostuvo que los papeles no eran suyos: "Las acciones no eran mías. Eran de acreedores. Estaban a mi nombre, pero tenían un dueño", aseveró.

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