Ciencia y Tecnología

Cien años de una revolución visual: Alemania recuerda la Leica

2014-10-24

Por Carola Große-Wilde (dpa) 

Hamburgo, 24 oct (dpa) - Pequeña, práctica, fiable: la cámara alemana Leica desató hace 100 años una verdadera revolución visual al convertir a los fotógrafos en testigos de primera mano y siempre preparados. Una muestra inaugurada hoy en Hamburgo repasa la historia de la máquina a través de sus fotos más icónicas.
  
"La Leica posibilitó un modo muy especial de ver. Fue el teléfono móvil de principio de siglo", señaló Hans-Michael Koetzle, curador de la exposición abierta hasta el 11 de enero. El invento aportó un verdadero cambio de paradigma en la fotografía, explicó: "Uno simplemente sale y puede fotografiar algo que aparece de pronto".

La primera máquina de la historia que usó una película de 35 milímetros fue desarrollada a más tardar en 1914 por Oskar Barnack, mecánico del taller de óptica Ernst Leitz. La Primera Guerra Mundial retrasó su lanzamiento a 1925, pero desde el primer momento la Leica (abreviatura de "Leitz" y "Camera") fue un éxito rotundo.

La exposición recoge alrededor de 550 imágenes tomadas desde entonces con la máquina por más de 140 artistas, incluyendo mitos de la fotografía como Henri Cartier-Bresson, Robert Capa, Christer Strömholm, Robert Frank, Bruce Davidson, René Burri y Thomas Hoepker.

El resultado es un verdadero recorrido por la evolución de la imagen, desde las primeras tomas de Oskar Barnack durante la Primera Guerra hasta los retratos actuales de Bruce Gilden.

En el camino figuran algunos de las mayores hitos en la historia visual del siglo XX: la niña vietnamita desnuda que huye de un ataque con Napalm retratada por Nick Ut en 1972, el espontáneo beso de un marinero a una enfermera en Times Square captado por Alfred Eisenstaedt en 1945 o el soldado ruso que iza la bandera soviética en un Berlín devastado en la foto de Yevgueni Jaldei en 1945.

La Leica también quedó en la historia a través del soldado abatido en la Guerra Civil española inmortalizado por Robert Capa (1936) o el retrato del Che Guevara por Alberto Korda (1960) que multiplicó el rostro del revolucionario argentino en millones de camisetas, tasas y carteles de todo el mundo.

"El ser humano es el gran tema", resumió Koetzle, director durante años de una revista específica sobre la Leica.

El experto pudo conocer personalmente a muchos de los fotógrafos que integran la muestra. "Todos tenían o tienen grandes personalidades con cierto ímpetu por cambiar el mundo y un marcado humanismo, que se define sobre todo por su cercanía al ser humano".

Tras su estreno en Hamburgo, la exposición viajará también por Berlín, Fráncfort, Múnich y Viena. Una oportunidad única para sumergirse en la historia un pequeño invento que desató una gran revolución.



EEM
Utilidades Para Usted de El Periódico de México