Reportajes

El mejor café vale su peso en oro en las subastas

2014-10-29

En una subasta en línea este mes por algunos de los granos de café más...

Por Leslie Josephs, The Wall Street Journal

En una subasta en línea este mes por algunos de los granos de café más codiciados de Ruanda, Dan Shafer llevaba horas sin dar su brazo a torcer, pero seguía perdiendo.

"No quiero hacer mi oferta ahora para no inflar el precio", dijo con los ojos pegados a la pantalla en un departamento en Brooklyn, Nueva York, que sirve como oficina de Crop to Cup Coffee Importers.

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Shafer, director de operaciones de la importadora de café, quería comprar cerca de una tonelada de granos cultivados en pequeñas granjas en Ruanda. Después de más de cuatro horas, se vio obligado a aceptar su derrota sobre uno de los dos lotes que buscaba llevarse cuando las ofertas superaron los US$8 la libra, más de cuatro veces el precio de referencia mundial.

El triunfo de una empresa surcoreana de café acentuó un patrón conocido por Shafer y otros compradores de Estados Unidos. Los postores del este de Asia dominan cada vez más las subastas electrónicas en donde se vende gran parte del café más caro del mundo.

Aunque los mercados europeo y estadounidense lo siguen superando, el consumo en toda Asia crece rápidamente junto con los ingresos, algo que está exprimiendo la oferta ya escasa e impulsando los precios. Algunos compradores dicen que los asiáticos están más dispuestos a pagar precios exorbitantes por el café más raro, una novedad en países que tradicionalmente consumen té, como China.

Los agricultores, cooperativas y empresas de corretaje venden la mayoría de los granos de café del mundo; solo una fracción se vende en subastas en línea. Sin embargo, una demanda pujante y la peor sequía en décadas en Brasil, que ha encogido la producción del mayor país caficultor del mundo, eleva el valor de los granos. Los futuros de referencia del café arábica se duplicaron este año hasta superar en algún momento los US$2,20 la libra, obligando a marcas de consumo masivo, como Starbucks Corp. , a elevar los precios. El café para entrega en diciembre cerró en US$1,9235 la libra el martes en el mercado de commodities ICE Futures U.S.

Los granos vendidos en subastas como en la que participó Shafer pueden venderse en US$30 o más la libra en tiendas y cafés. Aunque los precios de esos granos tienen un efecto pequeño en los precios que la mayoría de los consumidores pagan, la popularidad de granos raros y de alta calidad presiona a las principales tostadoras a comprar mejores granos, apuntan miembros de la industria.

"Tengo la impresión de que, muchas veces, los cafés están sobrevalorados" en las subastas, dijo Adam McClellan, un comprador de café para Stumptown Coffee Roasters, que opera 10 cafés en cuatro ciudades de EE.UU. "Terminas pagando mucho dinero por un café que compramos a una fracción del precio" en otros lados.

Su empresa intenta trabajar directamente con los caficultores para comprar granos. Esto marca un cambio para Stumptown. En 2007, un grupo de tostadoras estadounidenses estaba tan seducido por granos panameños de la variedad geisha que ofrecieron una cantidad récord de US$130 la libra, lo que causó que un programa de subastas en línea se atascara porque no estaba programado para procesar cifras de tres dígitos. En 2008, la granja que produjo los granos, Hacienda La Esmeralda, organizó su propia subasta en la que Stumptown se llevó los principales lotes a más de US$100 la libra.

En junio de 2012, un café surcoreano compró unas cuantas libras de mocca, una variedad inusual de la finca El Injerto, en Guatemala, por una cantidad récord de US$500 la libra, casi igual al precio de la plata en ese momento.

Esa variedad, al igual que la mayoría de los demás granos que se venden a precios altos, es cultivada en cafetales que dan pocos frutos y bajo condiciones exigentes para producir combinaciones únicas de sabores.

"El café de este nivel ya no es un commodity", dijo Mauricio Galindo, director de operaciones de la Organización Internacional del Café.

Las subastas de Cup of Excellence, en las que Shafer participó, comenzaron en 1999 con variedades brasileñas. El operador de las subastas, una organización estadounidense sin ánimo de lucro llamada Alliance for Coffee Excellence, dice que apuntan a conseguir un mejor precio para los caficultores y reconocimiento para sus granos. Algunos tipos de café se han vuelto tan populares que algunas fincas han comenzado sus propias subastas en línea.

Los participantes son identificados sólo por número cuando empiezan a colocar sus ofertas. La subasta termina cuando pasan tres minutos sin una puja.

Aunque las apuestas de más de US$99 son inusuales, muchas tostadoras asiáticas están dispuestas a pagar mucho dinero para poder alardear de ofrecer a sus clientes la crema y nata del café.

Seu Pil-hoon, un tostador y comprador de café verde para Coffee Libre, un operador de cafés y tostador en Seúl, también estaba en busca de granos en la subasta de Ruanda. Dijo que los consumidores en Corea del Sur tienen "serias obsesiones" por el mejor café del mundo "sin importar el precio".

Seu integraba la coalición, que incluía también a japoneses, que ofreció un récord de US$37,10 por libra del lote de granos de Ruanda de mejor calificación. Dijo que el precio valía la pena.

"Lo que me impulsó a [ganar] el lote mayor es un tipo de emoción que tendría un coleccionista de arte: amor verdadero", apuntó.

Seu dice que vende sus mejores granos en cerca de US$4 la taza o US$30 la bolsa de 200 gramos. El negocio ofrece "bajas utilidades", dijo. "No soy un buen empresario. Simplemente me gusta el café, y quiero ser un mensajero de buen café para el mercado".

Shafer no se iba a quedar con las manos vacías, y pagó US$7,10 la libra por otro lote. "No me conviene que me guste apostar", dijo.

 



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