Colombia, en vilo por el proceso de paz con las FARC

Por Tatiana Rodríguez (dpa)

Bogotá/La Habana, 19 nov (dpa) – Colombia está a la espera. Los próximos días o quizá semanas debe decidir sobre la continuación del proceso de paz con las FARC, después de que el presidente Juan Manuel Santos decidiera suspender el diálogo por el secuestro de un alto mando militar por parte de la guerrilla.

Justo cuando se cumplen exactamente dos años desde que empezaran las negociaciones en Cuba, todas las miradas están puestas en la posible liberación del general del Ejército Rubén Alzate, capturado el fin de semana cuando iba vestido de civil en una zona selvática del noroeste colombiano.

Alzate es el más alto militar jamás capturado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La sensación general en el país sudamericano es que el general podría ser liberado muy pronto, aunque la guerrilla ha evitado hasta ahora confirmar contactos con el gobierno.       

 "Nosotros no vamos a especular sobre el tema", advirtió hoy en La Habana el líder de las delegación guerrillera en Cuba y número dos en la jerarquía de las FARC, conocido como "Iván Márquez".

"Nosotros no es que conozcamos muchos detalles (sobre posibles contactos), pero sí sentimos que hay una gran movilización en este sentido", agregó "Márquez", que pidió que las gestiones involucren "tanto al gobierno nacional como a las FARC".

"Todo depende de las gestiones que estén adelantando las partes que tiene potestad para hacerlo", agregó.

Santos, por su parte, se ha mantenido firme en exigir la liberación de Alzate como condición para continuar el diálogo.

"Yo espero que este 'impasse' que se ha presentado en las negociaciones se resuelva pronto", dijo el mandatario, tras agradecer las gestiones que aparentemente llevan a cabo Noruega y Cuba para que el oficial sea puesto en libertad. Ambos países son garantes del proceso de paz.

Aunque la decisión de Santos cuenta con el apoyo de varios sectores políticos y sociales, en Colombia parecen aumentar las dudas sobre cómo se produjo la captura y las preocupaciones por el futuro del proceso de paz.

El analista político Ariel Ávila consideró hoy en diálogo con la agencia dpa que aunque la situación "es crítica" puede "solucionarse fácilmente". "Es contradictorio lo que pasa, pero el proceso está aún vivo y avanza en La Habana", indicó el coordinador de la Fundación Paz y Reconciliación.

Ávila criticó que el general Alzate diese "papaya" (se expusiera) a las circunstancias que condujeron a su captura. Según el soldado que manejaba la embarcación en la que se desplazaba el general Alzate, que iba vestido de civil y sin ninguna protección, le ordenó llevarlo por el río Atrato hasta el pequeño poblado de Las Mercedes en el departamento del Chocó, donde fue retenido.

El politólogo confía en que la liberación del general y sus acompañantes se dará a más tardar el fin de semana debido a que las FARC son una guerrilla que funciona bajo el mando y el control de unos jefes "que seguramente accederán a dar ese gesto de paz".

Por su parte, el senador Antonio Navarro, un ex guerrillero del desmovilizado Movimiento 19 de Abril (M-19), resaltó el secuestro de Alzate como un hecho histórico, debido a que "nunca antes un general en servicio activo había caído en manos de un grupo guerrillero" y se mostró confiado en que "todo se resolverá a favor de la paz".

"Si le llegara a pasar algo al general estaríamos ante una posible ruptura de las conversaciones pero yo creo que todo va a resolverse. Estoy convencido de que las FARC van a devolver al general y a sus acompañantes. No tan rápido, pero eso sí, harán de esa liberación un hecho noticioso importante", estimó el senador.

Las FARC, por su parte, apuntaron al líder máximo del grupo, Rodrigo Londoño, conocido como "Timoleón Jiménez" o "Timochenko", como responsable de decidir sobre la situación de Alzate.

Se estima que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) podría actuar como intermediario para la entrega del general, como ha ocurrido en similares entregas de prisioneros en el pasado.

"Nosotros confiamos mucho en la labor que pueda realizar el CICR", dijo "Márquez", que, sin embargo, tampoco confirmó si la Cruz Roja está involucrada como mediadora.

La suspensión de los diálogos de paz colombianos por la actual crisis tiene lugar justo cuando se cumplen dos años del comienzo de las conversaciones en La Habana. El proceso de paz entre el gobierno de Santos y las FARC se abrió formalmente en octubre de 2012 en Oslo.

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