Policrato Philodemos
Confesión de incompetencia
Alm.Manuel Rodrìguez Gordillo
"La ausencia de valores de la ineptitud
escoge la destrucción antes que aceptar
sus incapacidades manifiestas"
"La privatización de los servicio públicos gubernamentales"
Serían patéticas, si no fueran una traición a la promesa de servir que implicó la aceptación de sus mandatos al asumir el gobierno, las declaraciones que día con día hacen los responsables del suministro de agua potable de la Ciudad y Puerto de Veracruz, quienes, olvidando que están al servicio de sus mandantes (la comunidad veracruzana), tratando de confundir a los usuarios de un servicio público, como es el manejo de la red de agua potable, (implícito e indeclinable como responsabilidad toral de cualquier gobierno, por ser indispensable para la sobrevivencia de la comunidad), intentando hacernos creer que un servicio, puede convertirse en un negocio (por su conveniencia y voluntad de sus calzones), esto es, que pretenden retorcer la lógica para que el pueblo veracruzano acepte que se deslinden de sus obligaciones como gobierno y sean entregadas a la iniciativa privada, para que la conviertan en negocio sin importarles que significará un inevitable aumento al precio del agua, ya que la iniciativa privada no está asumiendo dicha tarea por filantropía, sino porque ésta les redituará una ganancia, en el supuesto caso de que el gobierno haya cobrado el servicio de agua potable con una cuota para la recuperación de los costos, porque de no ser así esta privatización se convierte en un intercambio de negocios entre fenicios, o una transa entre corruptos.
De acuerdo con la lógica legal, la cuota a pagar por los usuarios de servicios gubernamentales solo deben cubrir el costo de su administración, operación y mantenimiento, más no para obtener un lucro, y son ajenos a las leyes del mercado, mientras que en el ámbito comercial los negocios se crean y organizan para obtener una ganancia y están sujetos a las leyes del mercado, lo que dicho en otras palabras, se forman para obtener un lucro, finalidad que no es compatible con el ejercicio ni las funciones de un gobierno, a menos que este se haya divorciado de sus responsabilidades innatas (e intransferibles), como son la búsqueda del bien común, y en su lugar se dedique a la prevaricación comerciando con el ejercicio de sus funciones, desviación propia de una mentalidad fenicia y de usureros carentes de valores, que son la madre de todas las corrupciones.
Los antiguos sabios de la Grecia clásica reunieron en uno solo los atributos y funciones de los comerciantes y los ladrones, representándolos por el dios Mercurio, mientras que a las instituciones de gobierno y de justicia lo representaban por una diosa con una balanza en la mano derecha, que medía la equidad y la justicia, y una espada en la izquierda representando el poder que castiga a los infractores de la ley… ¿Acaso nuestros gobernantes de Veracruz han decidido abandonar el culto a la diosa de la justicia y el derecho, para convertirse en adoradores de Mercurio?... porque tal parece que confunden y mezclan sus deberes de servidores públicos, con el de mercaderes.
Visto desde otro ángulo la concesión a la iniciativa privada del manejo y administración del los servicios de agua potable, es una confesión manifiesta de incompetencia personal y de corrupción administrativa, ya que envía el mensaje de que carecen (o les conviene), de la voluntad y conocimientos como autoridad, para corregir las desviaciones, errores, o fallas que presentó dicho servicio, así como de la honestidad para reconocerlo y renunciar a su cargo, por lo que decidieron delegar y concesionar sus funciones a un comerciante (empresa le llaman), para que se encargue de hacerlo, aunque sin renunciar al salario que les concede la comunidad por el ejercicio de las funciones a las que renuncian, con lo cual nos mandan también el mensaje de que aceptan tácitamente su naturaleza corrupta, al desdeñar el juramento hecho ante el pueblo de cumplir y hacer cumplir la Constitución y Leyes que de ella emanan (donde se encuentran las obligaciones que asumieron), al aceptar los cargos que ostentan.
¿Acaso es que será muy difícil exigir a los colaboradores que hagan su trabajo?... ¿O será también imposible desligarse de la red de corrupción, cuando impide el correcto manejo operativo y el mantenimiento de la red de agua potable de una ciudad?... o simplemente… ¿No será que quienes gobiernan también son parte del problema?... Ud. decide su reclamo estimado lector, ya que lo están tratando como si fuera el súbdito (sin voz ni voto, ni representación alguna), de una monarquía absoluta.
EEM
