Migración
Berlín exige a los refugiados respeto a la ley ante los primeros disturbios
Berlín. (EFE).- El ministro alemán de Interior, Thomas de Maizière, exigió hoy a los refugiados respeto a la cultura y las leyes del país de acogida, tras registrarse los primeros disturbios entre solicitantes de asilo en albergues masificados, y prometió al tiempo combatir "los disparates ultraderechistas".
Aceptar las leyes y los valores alemanes significa "que digan su verdadero nombre y país de origen a los funcionarios, no pegarse, tener paciencia y respetar al otro por encima de religión o sexo", subrayó en el Parlamento mientras las autoridades de Hamburgo desplegaban a la policía en un albergue ante los altercados provocados por centenares de sirios y afganos.
Frente a este mensaje, el ministro hizo hincapié en el derecho de todos solicitante de asilo a ser tratado "en paz, con respeto y dignidad".
Aseguró así que actuará políticamente y "con toda la fuerza del estado de derecho" contra "los disparates ultraderechistas" y el fuerte aumento de los delitos contra los extranjeros, que han llegado, dijo, al intento de asesinato.
De Maizière pronunció este duro discurso en el pleno del Bundestag al presentar las reformas legales aprobadas de urgencia por el Gobierno para acelerar la tramitación de los expedientes, facilitar la integración de los refugiados, agilizar la expulsión de quien no reciba asilo y aumentar la financiación de los estados federados y de los municipios.
Sólo en septiembre Alemania recibió a 270,000 peticionarios de asilo, más que en todo 2014, y prevé que este año la cifra final superará los 800,000.
El titular de Interior dejó claro que "muchos se quedarán" y que "no deben ser sólo tolerados, sino aceptados totalmente" porque serán vecinos y conciudadanos.
En ese contexto abogó por una integración "en dos direcciones" y subrayó la importancia de abrir de forma temprana las puertas del mercado laboral a quienes tengan posibilidades reales de conseguir asilo y fomentar que aprendan el idioma.
Defendió además un reparto justo de los cientos de miles de solicitantes de asilo entre los estados federados y, en este punto, volvió a dirigirse a los refugiados para que respeten las decisiones que tomen las autoridades: "el asilo en Alemania no significa la elección libre de domicilio".
De Maizière reconoció que algunos de los albergues provisionales que se están acondicionando para la acogida no son cómodos y están sobrecargados, pero pidió no plantear "exigencias demasiado elevadas".
"Todo el mundo hace un esfuerzo enorme; no se puede hacer otra cosa en este momento", recalcó.
LAL
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