Un sindicato galo advierte de más protestas tras una reunión con el Gobierno

Por Emmanuel Jarry

PARÍS (Reuters) - El Gobierno francés mantuvo el viernes su primera reunión en tres meses con el sindicato que está organizando las protestas contra sus planes de reformar la legislación laboral, pero no se alcanzó ningún acuerdo.

El líder del sindicato CGT, Philippe Martinez, dijo que las conversaciones no cambiaron los planes de la manifestación programada para el próximo jueves que el gobierno dice que podría prohibir.

"El CGT y el Gobierno están en desacuerdo en asuntos fundamentales. Hoy confirmamos esos desacuerdos", dijo Martinez después de una reunión de 90 minutos con la ministra de Trabajo, Myriam El Khomri.

Martinez también dijo que la reforma que contiene los cambios contra los que se protesta en las calles debería suspenderse y abrir unas negociaciones sobre las propuestas de la CGT para reescribir elementos clave.

"La pelota está en el tejado del Gobierno", dijo Martinez.

La ministra dijo que la reunión había sido constructiva pero que el gobierno socialista se mantenía decidido a perseverar en una reformar que llevaría a que las condiciones laborales fueses negociadas al nivel de la empresa. El Gobierno dice que estas reformas son necesarias para ayudar a acabar con el alto desempleo.

El Khomri dijo que estaba contenta de haber retomado el contacto pero dijo a periodistas: "No hemos alcanzado un consenso. Hay desacuerdos y no son nuevos".

La tensión entre el Gobierno y el CGT, uno de los dos mayores sindicatos de Francia, aumentó con fuerza después de una escalada de violencia en las calles de París esta semana.

El primer ministro Manuel Valls acusó al CGT de no querer prestar atención a los grupos de jóvenes enmascarados que participaron en batallas campales con la policía, saquearon tiendas, pintaron edificios y rompieron las ventanas de un hospital infantil.

El presidente François Hollande ha amenazado con prohibir las manifestaciones por razones de seguridad en un país que está en estado de emergencia tras los ataques islamistas que mataron a 130 personas el pasado noviembre. Francia también alberga en la actualidad la Eurocopa de fútbol 2016.

The Guardian citó a otra residente, que solicitó el anonimato, que dijo que Mair nunca había tenido problemas con la policía, que "prácticamente vivía en la biblioteca" y que le gustaba escribir sus propias historias. "Estaba obsesionado con los libros. Su casa está llena de ellos", aseguró.

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