Internacional - Finanzas

La ambición china en infraestructura hace pie en el sector eléctrico de Brasil

2016-08-10

Una compañía estatal china busca quedarse con una empresa de electricidad de Brasil...

Por Kane Wu y John Lyons, The Wall Street Journal

Una compañía estatal china busca quedarse con una empresa de electricidad de Brasil por US$13,000 millones, en lo que podría ser la inversión más grande del gigante asiático en la mayor economía de América Latina.

State Grid Corp. of China, el mayor proveedor mundial de electricidad por ingresos, está cortejando a los accionistas de CPFL Energia S.A. y una subsidiaria que cotiza en bolsa, según fuentes al tanto. La empresa espera asegurar este mes las participaciones de grandes accionistas antes de realizar una oferta por el resto, dicen estas personas.

El acuerdo, cuyo valor incluye la asunción de la deuda de CPFL, podría inyectar una dosis de capital fresco a Brasil, que atraviesa una de las recesiones más profundas de su historia.

State Grid, enormemente rentable y con abundante efectivo, ha estado destinando más fondos al extranjero a medida que se desacelera el motor económico de China; la demanda de electricidad en el primer semestre de 2016 registró un aumento de apenas 2,7% frente al mismo período del año pasado.

En 2014, State Grid compró una participación de 35% en la italiana CDP RETI Srl por US$2,800 millones, un año después de haber pagado US$3,700 millones por una participación en la australiana SP AusNet Ltd. y sus subsidiarias. En una incursión anterior en Brasil, en 2010, la compañía invirtió US$1,000 millones en siete pequeñas empresas de transmisión eléctrica del sudeste del país.

Los activos globales de State Grid ascendían a más de US$450,000 millones al cierre de 2015. La empresa ya compró cerca de 23% de CPFL de manos del conglomerado de construcción Camargo Corrêa S.A., en una transacción de 5.850 millones de reales (US$1.840 millones) anunciada el mes pasado. También acordó adquirir la participación de Camargo Corrêa en CPFL Renováveis, su filial de energía renovable que cotiza en bolsa, según el mismo anuncio.

State Grid está ahora cortejando a otros accionistas, entre ellos el mayor fondo de pensiones de América Latina, Previ. Ejecutivos de Previ, que cubre a los empleados del prestamista estatal Banco do Brasil y posee 29,4% de CPFL, dijeron a través de un comunicado que evalúan la oferta. La estatal china confía en poder conseguir una participación controladora, según una fuente al tanto de la situación.

Eso desencadenaría una oferta por las acciones restantes por el mismo precio. La compra de activos de electricidad en el exterior es parte de la estrategia de Beijing de exportar su capacidad de construcción de infraestructura. En particular, State Grid está ansiosa por aplicar en nuevos mercados su pericia en la transmisión eléctrica de voltajes muy altos a larga distancia.

Brasil es un lugar idóneo para esta tecnología china gracias a las extensas distancias entre los recursos hidroeléctricos y las grandes ciudades. State Grid ya se ha asociado con la empresa estatal Eletrobras para conectar a la red eléctrica nacional la producción de una planeada represa hidroeléctrica de US$16,000 millones en la selva amazónica.

CPFL ha estado ya en manos extranjeras. Durante un tiempo en la primera mitad del siglo pasado, estuvo controlada por American & Foreign Power Co. El gobierno de Brasil tomó los activos bajo el nacionalismo económico promovido por la dictadura militar. La compañía fue privatizada durante las reformas económicas de los años 90 y hoy en día es una de las mayores empresas de servicios públicos, conformada por decenas de compañías de electricidad.

CPFL provee electricidad a más de 500 municipalidades en cuatro estados, incluido São Paulo, una potencia económica.

Este año, las empresas chinas han realizado una seguidilla de compras globales por una cifra récord de US$159,400 millones, incluyendo US$12,000 millones en acuerdos en el sector de electricidad y servicios públicos, según Dealogic.

Gracias a sus abundantes recursos naturales, Brasil se ha convertido en la última década en un proveedor cada vez más importante de materias primas a China. Hasta los años 90, el comercio bilateral era insignificante, pero en 2009 China superó a Estados Unidos como el mayor socio de Brasil, al comprarle mineral de hierro, soya y otros bienes básicos. La compra de CPFL representaría una ampliación de los lazos económicos, desde el comercio de commodities a la propiedad por parte de China de un engranaje crucial en la economía brasileña.

La transacción está también tangencialmente relacionada con el escándalo político en torno a la petrolera estatal Petróleo Brasileiro S.A. Una filial de construcción del holding de Camargo Corrêa ha estado recaudando fondos con la venta de activos desde que fue implicada en el escándalo de sobornos a cambio de contratos que avivó el proceso de destitución contra la presidenta Dilma Rousseff. Tres ex ejecutivos de la empresa de construcción, entre ellos el presidente de la junta, fueron condenados el año pasado. Voceros de Camargo Corrêa respondieron a las solicitudes de comentarios refiriéndose a los comunicados de CPFL sobre la transacción de State Grid.

Camargo Corrêa ha dicho que coopera con la investigación y que busca mejorar su gobierno corporativo y prácticas de control interno.

State Grid es el principal operador de la red eléctrica china y cubre 88% del país, distribuyendo electricidad a más de 1,000 millones de personas. El año pasado, registró una ganancia récord de US$13,100 millones sobre ingresos de US$312,000 millones.



TRO
Utilidades Para Usted de El Periódico de México