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¿Por qué a los hombres no les gusta hablar de la depresión?

2016-09-22

Pero los expertos temen que estas cifras no cuenten toda la historia. Los hombres son mucho menos...

Elizabeth Bernstein, The Wall Street Journal

Estoy preocupada por un amigo. Ha dejado de responder de manera fiable a los textos y las llamadas que le envío y parece irritable y nervioso cuando nos encontramos con él. Se queja de insomnio, de la falta de energía y de la falta de motivación. Cuando le pregunto cómo le va, dice: “No soy yo mismo. Me estoy ahogando”.

Está deprimido, y yo no sé cómo ayudarlo.

Las estadísticas muestran que los hombres se deprimen con mucha menos frecuencia que las mujeres. En 2014, el 4,8% de los hombres mayores de 18 años en EU tuvo al menos un episodio depresivo grave, en comparación con el 8,2% de las mujeres del mismo grupo de edad, según la Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y Salud llevada a cabo por la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias.

Pero los expertos temen que estas cifras no cuenten toda la historia. Los hombres son mucho menos propensos que las mujeres a dar a conocer que están deprimidos o a buscar tratamiento para la depresión.

Los psiquiatras y profesionales de la salud definen el trastorno depresivo grave como uno en que por lo menos cinco de los siguientes síntomas están presentes durante dos semanas: estado de ánimo depresivo durante la mayor parte del día; irritabilidad; pérdida de interés o placer en casi todas las actividades; cambio significativo de peso o apetito; cambios en el sueño; cambios en la actividad psicomotora, como mayor agitación o lentitud al caminar; fatiga o pérdida de energía; sentimientos de culpa o inutilidad; dificultad de concentración; y pensamientos recurrentes de muerte.

Las mujeres, según los expertos, a menudo internalizan los síntomas emocionales de la depresión, enfocándose en los sentimientos de inutilidad y de culpa. Los hombres, en cambio, los exteriorizan, concentrándose en los síntomas físicos. Por lo general no se ponen a llorar ni dicen que están tristes; se sienten atontados y se quejan por el insomnio, el estrés o la pérdida de energía. A menudo, se vuelven irritables y se enojan.

Algunos hombres no están en contacto con sus sentimientos. Pero el problema más grande es que los hombres han sido condicionados para no hablar sobre ellos. “Hay esta creencia de que deben estar en control de sus emociones y que estar deprimido puede ser visto como un signo de debilidad”, dice Jeffrey Borenstein, psiquiatra y presidente de la Fundación de Investigación del Cerebro y el Comportamiento, con sede en la ciudad de Nueva York. Se espera que los hombres sean capaces de manejar ellos mismos sus propios problemas, dice.

Esa sensación de debilidad puede empeorar la depresión masculina, dicen los terapeutas. “Para las mujeres, la depresión es una señal para obtener ayuda, algo que debe ser abordado de manera fundamental”, dice Nando Pelusi, un psicólogo clínico en Nueva York. “Para los hombres, es una señal de que son un fracaso y de que se están rindiendo” ante los problemas de la vida.

Esta sensación de derrota es la razón por la cual los hombres con depresión típicamente se replegan y se aíslan, dice Donald Malone, psiquiatra y jefe de psiquiatría y psicología de Cleveland Clinic.

Esto puede causar estragos en las relaciones de un hombre con sus seres queridos, especialmente sus cónyuges, que pueden sentirse heridos y rechazados por ellos. La investigación muestra que los problemas maritales pueden causar depresión tanto en hombres como en mujeres, pero un estudio clásico, publicado en 1997 por la revista Psychological Science, demostró que mientras que para las mujeres los problemas conyugales a menudo se presentan primero, para los hombres primero viene la depresión y después los problemas conyugales. “La respuesta masculina a la depresión es alejar a los demás, lo cual puede llevar a que su pareja se sienta indefensa y sola”, dice Wendy Troxel, psicóloga y científica social sénior de comportamiento de Rand Corporation, con sede en Pittsburgh.

¿Cómo se puede ayudar a un hombre que está sufriendo con la depresión?

1) Normalice la situación

Insista en que esto no es su culpa y que no está solo. “Busque ‘hombres’ y ‘depresión’ en internet; usted se sorprenderá de lo que se ve allí”, dice Michael Addis, profesor de psicología en la Universidad Clark, en Worcester, Massachusetts, y director del Grupo de Investigación sobre Bienestar Masculino. Muchos hombres destacados han sufrido de depresión, incluyendo a Abraham Lincoln, Winston Churchill, Buzz Aldrin y Bruce Springsteen.

Si usted ha sufrido de depresión, hable de su lucha contra ella. Explique a su amigo que la depresión es tratable y que es importante obtener ayuda, tal como se debe hacer con cualquier otra enfermedad.

2) Hable con cuidado.

No sea crítico. Su amigo ya se está castigando a sí mismo emocionalmente. Y no exprese preocupación o inquietud. Esto sugiere que usted no cree que él pueda manejar la situación por su cuenta.

“Sea sensible a la forma en que la depresión hace sentir [a su amigo] profundamente humillado”, dice Joshua Coleman, psicólogo y miembro principal del Consejo de Familias Contemporáneas, una organización sin fines de lucro con sede en la Universidad de Texas en Austin, que distribuye investigación sobre las familias estadounidenses.

Los terapeutas dicen que la palabra “nosotros” puede ser muy poderosa: “Estamos juntos en esto”. “Vamos a encontrar un tratamiento que funcione”.

3) Ni siquiera use la palabra

Las investigaciones muestran que los hombres pueden estar a la defensiva acerca de la palabra depresión, y que aquellos que son más tradicionalmente masculinos son los que más se resisten. En un estudio de 2013 en la revista Psychology of Men & Masculinity, los hombres que dijeron que no padecían depresión admitían sin embargo tener algunos de sus síntomas, como la ansiedad.

¿Mencionó su amigo o su pareja que tenía insomnio o que le faltaba energía? Anímele entones a buscar ayuda para el síntoma que está describiendo. Ver a un médico de atención primaria es un buen comienzo.

4) Pregunte sobre el suicidio.

Los hombres tiene cuatro veces más probabilidades que las mujeres de morir a causa de un intento de suicidio, a pesar de que las mujeres intentan suicidarse con más frecuencia. Ellos utilizan medios más letales.

No tenga miedo de preguntarle si tiene pensamientos de hacerse daño a sí mismo. Los expertos también recomiendan que le pregunte si tiene un arma en su casa y que le ofrezca guardarla hasta que él se sienta mejor. “Es como guardar las llaves del auto de un amigo cuando está borracho”, dice Troxel.

5) Sugiera una terapia que se centre en los cambios de comportamiento.

Muchos hombres no quieren hablar sobre sus sentimientos y creen que un terapeuta se les va a confirmar lo que ellos ya suponen: “Usted es un perdedor”.

Hay varios tipos de psicoterapia que han demostrado tener éxito para tratar la depresión y que se centran en el cambio de comportamiento. Ellas incluyen la terapia cognitiva conductual, que ayuda a una persona a cambiar sus pensamientos, y la activación conductual, que ayuda a una persona a involucrarse más en su vida cotidiana. Estos tratamientos pueden ser más cómodos para muchos hombres.

6) Anímele a hacer lo que hace bien.

Que un hombre realice las actividades en las que sobresale puede producirle una sensación de control y satisfacción, dice Troxel. Las actividades físicas producen endorfinas y las actividades sociales alimentan la oxitocina, la llamada hormona de sentirse bien.

Los hombres también suelen adquirir un sentido de logro al completar una tarea. Pero la depresión puede hacer que incluso una tarea sencilla se torne abrumadora. Troxel recomienda desglosar proyectos en partes más pequeñas para que sean más alcanzables y para fomentar una sensación inmediata de logro.

7) Exprese sus propios límites.

Es importante darse cuenta que usted no necesita estar recibiendo toda la ira o la culpa de un hombre deprimido, o que no tiene que ser la única persona de una relación que haga algo por salvarla. Si usted está alcanzando su límite, dígaselo con claridad. “Estoy preocupada por ti. Estoy aquí para ti. Pero necesito que busques ayuda”.

Si su marido está deprimido y usted se siente impotente, considere hacer terapia. La terapia le puede ayudar a entender lo que está pasando, y a cómo ayudar mejor.

8) No se rinda.

Sea persistente, incluso si él la está alejando de sí. “La gente mejora con el tratamiento”, dice Borenstein.



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