Internacional - Población
Protestas ciudadanas en Bolivia por racionamientos y escasez de agua
La Paz, 18 nov (EFE).- Las regiones bolivianas de La Paz (oeste) y Cochabamba (centro) registraron hoy protestas ciudadanas por los racionamientos y la escasez de agua que les afectan desde hace días por la falta de lluvias.
En La Paz, decenas de personas acudieron a una movilización convocada desde las redes sociales para manifestarse por los racionamientos de agua que desde hace diez días afectan a unos 340,000 habitantes en las zonas este y sur de la ciudad.
Los ciudadanos se congregaron frente al nuevo edificio del Ministerio de Economía portando botellas y cubetas vacías y más tarde se trasladaron hasta las puertas de la Empresa Pública Social del Agua y Saneamiento (Epsas), dependiente del Gobierno central.
Los manifestantes cuestionaron que el Gobierno de Evo Morales destine presupuestos millonarios a la construcción de un museo dedicado al mandatario, un nuevo Palacio de Gobierno, otra sede para el Legislativo o canchas deportivas, en vez de hacer inversiones para garantizar el abastecimiento de agua.
"Lo que estamos exigiendo es que se deje de gastar dinero en cosas ridículas (...) Queremos que deje de haber incoherencias, queremos agua. Este corte ha sido brutal", denunció Nemo Rivero, vecino de la zona Sur.
Rivero se siente "indignado" y se queja de que cada tres días tiene acceso a unas "horitas de agua y agua muy sucia".
Claudia Siñani, vecina de El Alto, ciudad aledaña a La Paz, dice no estar segura de que vayan a tener agua después de diciembre "porque las épocas de lluvia ahora van a ser cortas y las de sequía van a ser más largas" y se quejó de que en el Gobierno "recién se están preocupando" por el tema.
Hernán Molina, quien lleva dos días sin acceso al agua, culpa de la situación a "la incapacidad de la empresa Epsas" y a "una parte del Gobierno" porque "ellos manejan los fondos del Estado para poder hacer trabajos de intervención para poder tener agua".
Los manifestantes también pedían la dimisión de la ministra de Medio Ambiente y Agua, Alexandra Moreira y en medio de la movilización, quemaron dos muñecos de cartón que representaban a esa autoridad y al ministro de Economía, Luis Arce.
Con las consignas de "Queremos agua, no centro nuclear" o "Agua sí, palacios no", los ciudadanos llegaron hasta el edificio de Epsas, donde un cordón policial custodiaba la entrada.
René Quispe, un miembro de la Coordinadora del Agua de Cochabamba (centro), anunció durante la protesta que el próximo 27 de noviembre se efectuará en ese departamento una reunión nacional para acordar otras movilizaciones.
En Cochabamba, los pobladores de un distrito del municipio de Sacaba bloquearon por segundo día consecutivo la carretera que conecta esa región con Santa Cruz (este) por un conflicto con una comunidad vecina que les proveía de agua pero decidió cortar el suministro ante la sequía que azota al país.
Como ocurrió ayer, la policía reprimió con gases químicos la medida de presión, aunque los ciudadanos han advertido de que seguirán con la protesta hasta que les restituyan el acceso al agua.
La sequía que sufre Bolivia, la peor en los últimos 25 años, afecta también a otras ciudades y al área rural.
Por el problema en La Paz, el presidente Evo Morales decidió esta semana destituir a la autoridad nacional de regulación del sector de agua y al gerente de Epsas por no haber alertado a tiempo de que el nivel del agua en los embalses que proveen a la ciudad cayó a entre 5 % y 8 %, los más bajos en una década.
El gobernante anunció hoy que se harán nuevas perforaciones de pozos en busca de este recurso, con el objetivo de "al menos medianamente garantizar la dotación de agua".
JMRS
Notas Relacionadas
- Las fuertes lluvias caídas en Marruecos no consiguen paliar la sequía
- Líderes de la construcción piden a Biden alivio migratorio tras la tragedia de Baltimore
- El 'Silicon Valley' de la India impone nuevas restricciones para mitigar la crisis hídrica
- El hambre acecha a unos 20 millones de personas por la sequía en el sur de África
- "Esto es duro, muy duro": el día a día en Cuba, con escasez de comida y 10 horas de apagón
