Religión

Nuevo llamamiento del Papa contra el terrorismo, la violencia y el uso de niños soldados

2017-02-19

Siento profundo dolor por las víctimas, en especial por tantos niños arrebatados de...

 

(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 19 Feb. 2017).- El papa Francisco hizo este domingo un apremiante llamamiento a las autoridades nacionales y a la comunidad internacional pidiendo por las poblaciones que sufren la violencia, el terrorismo y la guerra. En particular por “tantos niños arrebatados a sus familias y de la escuela para ser usados como soldados”. Y reiteró: “¡Ésta es una tragedia: niños soldados!”.

Señaló también que reza por ellos y por los operadores humanitarios y religiosos que allí trabajan, y para que todo corazón endurecido por el odio se convierta a la paz, según la voluntad de Dios.

En sus palabras dichas desde la ventana de su estudio que da a la plaza de San Pedro, donde en este soleado domingo del invierno europeo se habían reunido miles de fieles y peregrinos, el Papa en estas palabras dichas después de rezar la oración del ángelus, señaló su consternación y  pidió que se impulse la ayuda humanitaria, en particular en la provincia céntrica congoleña de Kasai, donde se registran violentos enfrentamientos. También recordó a Pakistán golpeado por los recientes atentados.

“Queridos hermanos y hermanas"

Lamentablemente siguen llegando noticias de enfrentamientos violentos y brutales en la región de Kasai Central, de la República Democrática del Congo. Siento profundo dolor por las víctimas, en especial por tantos niños arrebatados de sus familias y de la escuela para ser usados como soldados. ¡Ésta es una tragedia: niños soldados!

Aseguro mi cercanía y mi oración, también al personal religioso y humanitario que trabaja en esa difícil región. Y renuevo un apremiante llamamiento a la conciencia y a la responsabilidad de las autoridades nacionales y de la comunidad internacional, con el fin de que se tomen pronto decisiones adecuadas para socorrer a estos nuestros hermanos y hermanas.

Oremos por ellos y por todas las poblaciones en otros lugares del continente africano y del mundo sufren a causa de la violencia y de la guerra.

Pienso, en particular, en el querido pueblo paquistaní, golpeado por crueles actos terroristas en días pasados.

Oremos por las víctimas mortales, por los heridos y sus familiares. Oremos fervientemente para que todo corazón endurecido por el odio se convierta a la paz, según la voluntad de Dios”.



JMRS