Internacional - Política

China y Estados Unidos chocan en la ONU por Corea del Norte 

2017-09-05

En un día bueno para la empresa, el valor de los iPhones que vende Apple valen tanto como...

PABLO PARDO / El Mundo

En un día bueno para la empresa, el valor de los iPhones que vende Apple valen tanto como todas las exportaciones de Corea del Norte en un año. Pero ser miserablemente pobre no implica ser pacífico. El régimen de Kim Jong-un ha demostrado que sigue siendo el centro de la actualidad internacional, y que, además, es perfectamente capaz de dividir a las grandes potencias. Así quedó claro con la reunión urgente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebrada ayer para estudiar el ensayo nuclear de Corea del Norte, en el que Pyongyang hizo explotar una bomba atómica con una potencia equivalente a entre 3 y 8 veces a la que EU lanzó sobre Hiroshima en 1945.

La reunión del Consejo se resume con facilidad: muchas palabras duras y muy poca coordinación. La embajadora de EU en la ONU, Nikki Haley, declaró que el régimen de Pyongyang está "suplicando la guerra", y reclamó una acción urgente ante una situación que "llevamos dejando para mañana" desde mediados de la década de los noventa. Haley dijo que la situación en Corea del Norte ha llegado a un momento en el que "no puede haber más en juego", y es necesario cambiar una política marcada por "veinticuatro años de políticas a medias y de negociaciones fracasadas".

Pero, ¿qué significan esas palabras? Estados Unidos lanzó ayer una propuesta de nuevas sanciones contra Corea del Norte, que deberán ser votadas por el Consejo de Seguridad el lunes próximo. La propuesta de Washington no se centraba en Pyongyang, sino en los países que mantienen el régimen de Kim Jong-un.

Pero esos países no son fáciles de sancionar. Corea del Norte lleva a cabo el 74% de su comercio exterior con la segunda mayor potencia mundial: China. Le siguen, en orden de importancia, India - un aliado de EU - y Rusia. La cuestión es: ¿está dispuesto Washington a sancionar económicamente a Pekín por ser el salvavidas económico de Kim Jong-un? Porque las relaciones económicas entre los dos países asiáticos no se guían por el comercio, sino por la política. La mejor muestra de eso es que las principales exportaciones de Corea del Norte a China son briquetas de carbón, es decir, trozos de ese mineral empaquetados en ladrillos, como los que se emplean en las barbacoas. Pensar que China, que es el mayor productor de carbón del mundo, y el tercer país por reservas de ese mineral, necesita importar esas briquetas de Corea del Norte es un insulto a la lógica.

El problema del Gobierno de Donald Trump es que no puede seguir ocultando, como hicieron sus predecesores Bill Clinton, George W. Bush, y Barack Obama, que Corea del Norte depende económicamente de China. Sin Pekín, Pyongyang duraría muy poco. Pero a China le viene bien que Corea del Norte actúe como un estado-tapón frente a Japón y a Corea del Sur, dos potencias aliadas con Estados Unidos. Así que puede tolerar las humillaciones de Kim Jong-un, como la de este último ensayo nuclear, realizado exactamente el día en el que el presidente chino, Xi Jinping, celebraba la 'cumbre' de los BRICS (el grupo de potencias emergentes formado por Brasil, Rusia, India, Sudáfrica, y la propia China) al que, además, había invitado a México, Tailandia, Egipto, Kenia, y Tayikistán.

De hecho, la reunión del Consejo de Seguridad estuvo marcada por un durísimo enfrentamiento verbal entre Haley y el embajador chino, Liu Jieyi, que no acaparó los titulares de las advertencias de guerra, pero que revela el trasfondo del debate. Liu culpó a Corea del Norte de la crisis, pero declaró que "China nunca tolerará caos y guerra en la Península [de Corea]" y, conjuntamente con el embajador ruso, Vassily Nebenzia, propuso una "suspensión por suspensión". Es decir: el compromiso de Corea del Norte a suspender sus ensayos nucleares y de misiles a cambo de que Estados Unidos y Corea del Sur no lleven a cabo más maniobras militares conjuntas. La respuesta de Haley fue calificar de "insultante" la idea. Por si eso no bastara, Nebenzia declaró a la prensa que "las resoluciones destinadas a castigar solo a Corea del Norte no han funcionado".

Así que volvemos a la casilla de salida. Como dijo el ex máximo asesor político de Donald Trump, y líder del ala ultranacionalista del equipo del presidente, Steve Bannon, "no hay solución militar aquí. Nos han ganado". Las declaraciones de Bannon han sido ignoradas por los secretarios de Defensa y de Estado de EU, Rex Tillerson James Mattis, que siguen reclamando que Corea del Norte lleve a cabo "una desnuclearización completa, irreversible y verificable". Es una opción que, si bien es la línea oficial de EU, no es realista en absoluto.

El presidente ruso, Vladimir Putin, ha tachado este martes de "inútil e ineficaz" el recurso a nuevas sanciones contra Pyongyang y ha dicho que "una histeria militar" en torno a Corea del Norte "puede llevar a una catástrofe planetaria".

"Rusia condena estos ejercicios" de Corea del Norte, "pero el recurso a sanciones de cualquier tipo en este caso es inútil e ineficaz", ha recalcado Putin, al margen de la cumbre de los BRICS.

"Una histeria militar no tiene ningún sentido (...) Todo esto puede conducir a una catástrofe planetaria, y a un gran numero de víctimas", ha advertido el presidente ruso.

Los norcoreanos "no van a renunciar a su programa [nuclear si no se sienten en seguridad. Por tanto hay que intentar abrir un diálogo entre las partes interesadas" ha abogado Putin, que parece sumarse así a la posición de Pekín a y la reanudación de las negociaciones con el régimen.
 



yoselin
Utilidades Para Usted de El Periódico de México