Internacional - Política

El Gobierno no considera válida la respuesta de Puigdemont

2017-10-16

En declaraciones durante la celebración de un acto de ministros iberoamericanos de Justicia,...

MARISA CRUZ- EFE

El Gobierno no considera válida, por falta de claridad, la respuesta por carta que el president Carles Puigdemont ha dado a su pregunta de si declaró la independencia el pasado martes, según ha explicado el ministro de Justicia, Rafael Catalá, esta mañana.

En declaraciones durante la celebración de un acto de ministros iberoamericanos de Justicia, Catalá ha recordado que, además de preguntarle si había declarado la independencia, el presidente Mariano Rajoy le dio un segundo plazo, hasta el jueves, para que explicase las medidas que va a adoptar para recuperar el cumplimiento de sus obligaciones.

El Gobierno recordó anoche, 12 horas antes de que se cumpliera el plazo dado a Puigdemont, que el presidente de la Generalitat estaba "obligado" a ofrecer "una respuesta clara y sencilla" al requerimiento que se le hizo el pasado miércoles en los términos en los que se formuló. Es decir, aclarar sin género de dudas si en su comparecencia ante el Parlament había declarado o no la independencia.

"Sólo esa respuesta evitará la aplicación del artículo 155", advertían desde La Moncloa.

"Cualquier otra suerte de contestación, sea una carta o la simple reiteración de su discurso, no evitará el 155". Ése era el aviso que se hacía desde el Gobierno en previsión de que el presidente de la Generalitat remitiera, como finalmente ha hecho, una larga misiva en la que lejos de dar una respuesta nítida se explaya en sus quejas por la actuación de las fuerzas de seguridad el 1-O, insiste en el deseo de independencia y en el derecho a decidir de los catalanes, plantea un plazo de dos meses de negociación con el Ejecutivo central y reclama una reunión urgente con Rajoy para abrir ya dicha negociación.

La respuesta proporcionada por el president no cumple ninguno de los requisitos establecidos por el Gobierno y, en consecuencia, no sirve para poner fin a la tensión de los últimos días ni para recuperar, como deseaba el Ejecutivo, "la convivencia y el marco legal previo a cualquier diálogo político.

Rajoy siempre ha insistido en su disposición a abrir un cauce de diálogo con la Generalitat siempre y cuando esta renuncie a la secesión y retorne al marco que definen la Constitución y las leyes.



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