Nacional - Población

Aumentan las víctimas en Chiapas 

2017-12-20

Pérez señaló que realizó una visita a la zona de las montañas y...


(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 20 DIC - La cifra de muertes por el conflicto territorial en el estado sureño de Chiapas, con el desplazamiento de más de 5,000 indígenas, se elevó a 11 y la Iglesia católica alertó hoy que podría escalar a medida que se agrava la emergencia humanitaria.
    
El párroco de Simojovel, una localidad de la región, Marcelo Pérez, dijo a ANSA que paramilitares han estado disparando contra cinco comunidades de Chalchihuitán, que mantiene una disputa con su vecino de Chenalhó, donde viven entre 2,000 y 2,500 personas, que se teme puedan también organizar un nuevo éxodo.
    
"Hasta ahorita no ha sucedido y esperamos que no pase, pero si se ven obligados a huir para salvar sus vidas, estaríamos hablando de algo que nos rebasa", advirtió el sacerdote católico.
    
El religioso afirmó que la solución al problema pasa por varias vías: "la ayuda humanitaria inmediata, pero también el desarme de los grupos paramilitares, así como el inicio de un diálogo" para solucionar el problema, pues un fallo reciente de un tribunal fue rechazado por los habitantes de Chalchihuitán.
    
Pérez señaló que realizó una visita a la zona de las montañas y la selva donde se refugiaron los desplazados el pasado 14 y 15 del presente mes, para constatar las condiciones en que se encuentran los indígenas tzotziles.
    
"Como viven en extrema pobreza, hay desnutrición y al convertirse en desplazados, se agudiza más su desnutrición, por lo que han muerto cinco ancianos de hambre y de frío", señaló el sacerdote.
    
"Hay mucha enfermedad. Tosen mucho los niños, sufren males del estómago por la situación que viven, pero el mayor impacto es el psicológico, que es muy fuerte, porque este problema los destruye emocionalmente", sostuvo.
    
El problema surgió en la misma región que fue escenario, en enero de 1994, del levantamiento armado zapatista.
    
El arzobispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi, realizó una visita a los desplazados de cuatro horas, un día después de la que realizó el párroco de Simojovel, el sábado pasado, y pudo constatar que la situación se recrudece.
    
Los indígenas desplazados están a merced del intenso frío de la temporada, viviendo bajo carpas de plástico.
    
Arizmendi acudió ante versiones de que el problema estaba en vías de solucionarse al emitir un juez un decreto donde supuestamente se establecen en forma clara los nuevos límites entre Chalchihuitán y Chenalhó, y de que los desplazados estaban retornando a sus hogares.
   
"Pude pasar por la carretera, que ya está libre desde Las Limas hasta la cabecera municipal, y observé muchas casas totalmente abandonadas. Sus dueños no se atreven a regresar por sus pertenencias y ver sus animalitos, menos a cosechar su café", afirmó el prelado.
    
Arizmendi señaló que los desplazados aseguran que todavía "se siguen escuchando disparos de armas de alto poder, por parte de grupos armados que dicen son promovidos por autoridades de Chenalhó". "Es imposible que ahora puedan recuperar sus casas y sus tierras, después del fallo del Tribunal Unitario Agrario, que dictamina regresar esas tierras a Chenalhó", dijo Arzimendi.
    
El párroco de Simojovel afirmó que todavía es posible resolver el problema mediante "el diálogo", pero para ello se requiere "que las autoridades hagan un desarme en Chenalhó", cuyos pobladores cortaron los caminos hacia Chalchihuitán.
    
"Se ve que los grupos armados actúan impunemente, no hay nada que los tranquilice y los calme. Sí es posible la paz pero sí hay que tener la disposición de ambas partes", afirmó el cura.
    
El religioso agregó que "Chalchihuitán quiere luchar pacíficamente, no por las armas, pero hay que generar condiciones y espacios".
    
En este sentido, señaló que "la iglesia está disponible en ser mediadora" en el conflicto, que data de hace 43 años, cuando el entonces llamado ministerio de la Reforma Agraria entregó a Chalchihuitán 363 hectáreas, mediante una resolución presidencial, en los límites con Chenalhó, ocupadas legalmente.
    
Sin embargo, Chenalhó no aceptó la resolución bajo el argumento de que no tomó en cuenta los límites del río, que consideran ancestrales y eso abrió "la Caja de Pandora". 



regina