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Estados Unidos de Europa 

2018-02-14

Es un error. Si los europeos queremos sobrevivir en el mundo global, debemos dar pasos hacia unos...

IÑAKI GIL| El Mundo


El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, declaró ayer: "Estoy en contra de un superestado europeo; no somos los Estados Unidos de Europa".

Es un error. Si los europeos queremos sobrevivir en el mundo global, debemos dar pasos hacia unos Estados Unidos.

Juncker, al que tengo por europeísta, se puso a la defensiva ante unas declaraciones previas de Boris Johnson. El secretario del Foreign Office es un demagogo y uno de los principales responsables del Brexit. Marginado de la negociación, busca protagonismo y una justificación al lío que han organizado. Por eso, enfrenta «el deseo legítimo de autonomía» del Reino Unido con "el objetivo de crear un Estado europeo global". ¡Qué más quisiéramos los partidarios de más Europa, Boris!

En lo que sí estoy de acuerdo con Juncker es en la necesidad de que la Unión Europea tenga un presidente único. Para empezar a andar camino.

Su propuesta es fundir dos cargos, el de presidente de la Comisión, órgano ejecutivo de la UE, con el de presidente del Consejo Europeo que representa a los Estados. Dado que el titular de este último, el polaco Donald Tusk, no tiene opciones a repetir y que el propio Juncker ha anunciado que no seguirá, el momento idóneo será 2019, cuando elijamos un nuevo Parlamento Europeo.

Y para que haya más transparencia y más democracia es imprescindible que se mantenga el sistema spitzenkandidat. Este término alemán quiere decir que cada familia política (populares, socialdemócatas, liberales, etc.) designa quién de los suyos presidirá la Comisión en caso de ser la más votada. Así, en 2014, las listas del PP europeo, con un 29% fueron las más votadas. Y Juncker, presidente.

El Parlamento y la Comisión quieren que se consolide el procedimiento. Pero, los Estados se reúnen la próxima semana y andan enredando. Espero que no den marcha atrás, ahora que los británicos están de salida.

Es lo mínimo. Yo hago mía la propuesta de dos italianos, Ernesto Galli della Loggia y Roberto Esposito. Bajo el título "Elijamos al presidente de Europa", proponen que "los europeos, reunidos en un solo cuerpo electoral (no por países, como ahora) elijan directamente al presidente de la Unión".

¿Lejano? ¿Utópico? Sin duda. Pero la otra opción es ir hacia atrás y ser unos pigmeos.



regina