Internacional - Política

Jameneí y Rohaní insisten en que Irán frustró las amenazas de "los enemigos"

2018-03-20

"Las amenazas de los países de la zona, una de las cuales buscaba golpear a...

 


Teherán, 20 mar (EFE).- El líder supremo iraní, Ali Jameneí, y el presidente del país, Hasan Rohaní, insistieron hoy en que Irán logró frustrar los planes y amenazas de "los enemigos", en sendos discursos con motivo del año nuevo persa 1397.

"Las amenazas de los países de la zona, una de las cuales buscaba golpear a Irán, fueron convertidas por la República Islámica en oportunidades", subrayó Jameneí en alusión a la política antiiraní de su rival Arabia Saudí, que -agregó- "no dañó al país".

El líder se refirió asimismo a las protestas antigubernamentales de finales de diciembre, que achacó a planes del "enemigo", y a las posteriores marchas pro régimen.

"Según tenía planeado el enemigo, surgieron algunos disturbios en el país, sin embargo, el propio pueblo, de forma voluntaria, les plantó cara", indicó.

En la misma línea, Rohaní aseveró que "los iraníes salieron a las calles en respuesta a los disturbios organizados y dieron el mensaje de que (...) bajo ninguna circunstancia toleran la ilegalidad o la violencia".

"La unidad de la nación iraní ha sorprendido a todos los enemigos, que han admitido la grandeza de nuestro pueblo", dijo el presidente en su alocución televisada.

Además, señaló que "los enemigos intentaron poner de rodillas a la nación, pero fue en vano".

Las autoridades iraníes acusaron a EU, Arabia Saudí e Israel de estar detrás de las protestas antigubernamentales de diciembre y enero, que se saldaron con 25 muertos y un millar de detenidos.

En sus discursos, Jameneí y Rohaní también se centraron en la situación económica del país, designando el líder como lema del año 1397 "apoyar el producto iraní".

"Nuestros temas centrales son la economía y el poder adquisitivo de la población. Todos deben de esforzarse, todos deben trabajar y el eje principal debe ser la producción nacional", dijo Jameneí.

A su juicio, si se fomenta la producción nacional "muchos de los problemas económicos se solucionarán", entre ellos el desempleo, y "disminuirán en gran medida los problemas sociales".

Al respecto, Rohaní afirmó que "todos deben apoyar los productos iraníes para ayudar a promover el empleo y luchar contra la pobreza".

El presidente invitó, además, a los inversores locales y extranjeros a "no escatimar esfuerzos para reconstruir el país".

La situación económica en Irán sigue siendo delicada pese al levantamiento de las sanciones internacionales contra el país gracias al acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Teherán y el Grupo 5+1, integrado por EU, Rusia, China, Francia y Reino Unidos más Alemania.

Las grandes inversiones extranjeras que se esperaban se están haciendo de rogar y puede que se suspendan si EU decide finalmente abandonar el pacto nuclear.


 



yoselin

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