Internacional - Política

El objetivo de Macron en Estados Unidos: conseguir que Trump mantenga el acuerdo nuclear con Irán

2018-04-24

Si Macron y Merkel pueden convencerle para que mantenga el acuerdo, sin duda influirá en su...

TORRES | El Mundo

 

Todavía tiene el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a los líderes europeos sin saber qué pensar de sus formas. Prefiere Twitter para comunicarse con sus votantes a los elaborados comunicados de prensa de la Casa Blanca. No le encuentra la necesidad a utilizar los protocolos del departamento de Estado. Este lunes recibe al presidente de Francia, Emmanuel Macron, con el que ha entablado desde su viaje a París cierta amistad. Un bromance como lo llaman en Estados Unidos si se compara con la relación con el resto de los líderes europeos. Ha hecho del francés el primer líder extranjero para el que Trump manda desenrollar las alfombras rojas en la primera visita de Estado, que se prolongará durante tres días.

Macron aterrizó en Washington, donde le recibió Trump. Después ambos líderes junto con sus esposas se desplazaron en helicóptero a Monte Vernon, la plantación del primer presidente de Estados Unidos, George Washington. Allí disfrutaron de una cena durante la puesta de sol en la terraza con vistas al río Potomac.

De esta forma, el francés buscará sus fotos en el despacho oval y en el Congreso para apuntalar la imagen de Francia de potencia internacional y la suya como líder de Europa. Tanto él como la canciller alemana Angela Merkel, que viene el viernes pero sin los honores de Macron, tienen un claro mensaje para el republicano: mantén el acuerdo nuclear con Irán. Además la alemana, que viene en una visita de 24 horas, tiene marcado en rojo el asunto de los aranceles sobre acero y aluminio, que perjudica sobre todo a Alemania dentro de los países de la Unión Europea.

Independientemente de la opinión que tengan los líderes europeos sobre el republicano, todos están unidos ante su postura sobre este acuerdo nuclear con Irán, contra el que el republicano hizo campaña cuando se presentó como candidato presidencial en 2016. Trump prometió abandonarlo a no ser que los firmantes europeos, Francia, Alemania y Reino Unido, se comprometiesen a mejorarlo. Por ello,se vuelve a marcar en rojo la fecha del 12 de mayo, en la que Trump debe firmar la exención de las sanciones de Estados Unidos sobre Irán. Una firma que ya ha amenazado con no llevar a cabo como en otras ocasiones, aunque siempre termina haciéndolo.

En los últimos días, los negociadores estadounidenses y europeos han accedido a la posibilidad de estrechar el cerco al programa de misiles balísticos de Irán. Pero, no consiguen ponerse de acuerdo en cómo hacerlo a partir del acuerdo original. A pesar de las divisiones de los diferentes diplomáticos de la Unión Europea, en este asunto coinciden en la necesidad de mantener el acuerdo. Todavía así, esperan poder persuadir a Trump para que Estados Unidos se mantenga en el acuerdo.

De momento, Macron parece el mejor interlocutor de la Unión Europea para tratar con Trump después de su visita a París, en la que el francés le agasajó con una cena bajo las estrellas en la Torre Eiffel y el desfile militar en el Día de la Toma de la Bastilla.

Si Macron y Merkel pueden convencerle para que mantenga el acuerdo, sin duda influirá en su encuentro dentro de unos días con el líder de Corea del Norte, Kim Jong un, el cual ya tiene un pequeño arsenal nuclear. Cancelar el compromiso con Teherán podría complicar las posibilidades de cualquier acuerdo con el norcoreano.

Dentro de su propio Gabinete, la postura de cara al futuro genera diferentes divisiones. El nuevo consejero de Seguridad Nacional, John Bolton, ex embajador ante Naciones Unidas, defiende poner fin al acuerdo. Mientras, el director de la CIA, Mike Pompeo, futuro secretario de Estado, ya confirmado en el comité de Relaciones Exteriores del Senado, prefiere endurecer las condiciones.

El martes, Trump y Macron tendrán una reunión en el despacho oval. Después el vicepresidente Mike Pence será el anfitrión de un almuerzo en el edificio del departamento de Estado, y más tarde visitarán el cementerio nacional de Arlington.

La cena de Estado del martes romperá con la tradición de invitar a los legisladores del partido de la Oposición del Congreso y periodistas. Al contrario que el anterior presidente Barack Obama, conocido por sus grandes cenas multitudinarias, Trump optará por una velada más discreta, a la que acudirán 150 invitados.

El miércoles Macron pronunciará un discurso ante las dos cámaras del Congreso, que coincidirá con el 58 aniversario del mismo discurso del presidente francés Charles de Gaulle en 1960.



Jamileth