Nacional - Seguridad y Justicia

Por la fuerza y armados, supuestos marinos desaparecen a decenas en México

2018-06-01

La ONU dijo el miércoles que hay fuertes indicios de que las fuerzas de seguridad mexicanas...

Por Lizbeth Diaz


CIUDAD DE MÉXICO (Reuters) - Una noche de marzo, Daniel Trejo, un mecánico de autos que vivía en una zona de México fronteriza con Estados Unidos, fue sacado violentamente de su casa por presuntos marinos armados. Aquella fue la última noche en que su esposa lo vio.

Pero el hombre de 41 años no fue el único. La ONU dijo el miércoles que hay fuertes indicios de que las fuerzas de seguridad mexicanas serían responsables de haber hecho desaparecer a 23 personas en el norteño estado Tamaulipas entre febrero y mediados de mayo de este año.

Sin embargo, el local Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL) dijo a Reuters que la cifra podría más que duplicarse si se agregan los casos de enero y otros que la ONU aún no ha reportado, pero ellos sí.

“Entraron a mi casa rompiendo la puerta (...) nos apuntaron con armas largas en la cabeza a mí y a mi esposo. Cuando vieron que era ciudadana estadounidense pensé: ‘me van a matar’”, dijo Jessica Molina, esposa de Trejo.

“Se lo llevaron sin una orden de aprehensión, aun cuando les demostró que estuvo trabajando todo el día en su taller mecánico en Texas”, agregó vía telefónica. Los hechos acaecieron en Nuevo Laredo, una ciudad mexicana en la frontera con Estados Unidos.

Tamaulipas ha sido por muchos años uno de los estados más violentos del país, donde grupos criminales se disputan rutas para el tráfico de drogas, de migrantes y otros delitos. Este año, dos periodistas fueron asesinados en la región.

En marzo, 10 marinos resultaron heridos y un jefe de la misma institución fue asesinado durante un enfrentamiento con supuestos criminales en Nuevo Laredo. En el fuego cruzado, tres personas murieron, entre ellas dos menores de edad.

“Los días posteriores a este incidente fueron terribles para la comunidad de Nuevo Laredo porque comenzaron desaparecer personas casi todos los días”, dijo Raymundo Ramos, director del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL), que vinculó el episodio con el auge de desapariciones.

El defensor de derechos humanos dijo a Reuters que hasta ahora no han tenido una respuesta clara de ninguna autoridad, pese a que algunos detenidos fueron hallados días después en fosas clandestinas, incluyendo un adolescente de 14 años.

“QUIEREN QUE DEJEN DE DENUNCIAR”

La violencia y las desapariciones forzadas se han extendido en los últimos años en México. En septiembre de 2014 ocurrió uno de los casos más significativos cuando 43 estudiantes en el suroeste del país desaparecieron a manos de policías coludidos con el crimen organizado.

Ramos, quien ha vivido por muchos años la violencia en su natal Nuevo Laredo, dijo que la situación para familiares y testigos del hecho se agravó durante la última semana con casos de tortura, secuestro y amenazas de muerte.

“Quieren que ellos dejen de denunciar”, dijo Ramos, agregando que su documentación abarca entre el 20 de enero y el 21 de mayo y, en ese lapso, contabilizaron 56 casos de desaparición forzada y ejecuciones extrajudiciales.

Familiares de las víctimas insistieron en que los responsables son marinos. En videos que compartieron con Reuters se puede ver a presuntos efectivos armados y vestidos con uniformes con camuflaje similares a los que usan integrantes de esa institución.

La Secretaría de Gobernación dijo el jueves en un comunicado que se coordinaría con la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Derechos Humanos para ir a Nuevo Laredo a hablar con víctimas y testigos a fin de esclarecer el caso.

“Queremos que nos entreguen a nuestros familiares vivos, ya basta de que nos quieran exterminar y acabar al pueblo”, dijo Molina, la esposa del mecánico desaparecido. “Todos tenemos miedo pero no por eso vamos a parar”.



Jamileth