Agropecuaria

Apuesta argentina para ganar acceso a mercado de harina de soja de China avanza lento: cámara

2018-11-23

China necesita enormes cantidades de forraje, pero históricamente ha protegido su industria...

Por Hugh Bronstein

BUENOS AIRES (Reuters) - Las conversaciones para que la harina de soja argentina ingrese a China están progresando a un ritmo lento por problemas burocráticos, que incluyen la solicitud de China de inspeccionar plantas de molienda del país austral, dijo el titular de la cámara argentina de la industria.

Luis Zubizarreta, presidente de la cámara sectorial ACSOJA, que representa a productores, exportadores y firmas semilleras, dijo que Argentina quiere un acuerdo de exportación que asegure el acceso al mayor productor mundial de carne de cerdo.

China necesita enormes cantidades de forraje, pero históricamente ha protegido su industria procesadora mediante la importaciones de granos de soja que luego son molidos localmente.

Sin embargo, la guerra comercial entre China y Estados Unidos -su segundo proveedor de granos de soja- limitó el flujo de la oleaginosa a las plantas del gigante asiático, lo que llevó al país a buscar los granos en otros vendedores.

El presidente argentino, Mauricio Macri, espera anunciar el acuerdo para enviar harina de soja a China durante la cumbre de líderes del G-20 que se realizará a fin de mes en Buenos Aires, aunque la fecha parece demasiado ambiciosa.

“El Gobierno de Argentina está empujando para concretarlo, pero depende de la decisión del Gobierno de China de hacer algo que nunca antes hizo: importar harina de soja de Argentina”, dijo Zubizarreta en una entrevista.

“Es un camino complicado cambiar una política que se ha desarrollado durante tanto tiempo”, añadió.

Argentina ha sido durante mucho tiempo el principal exportador mundial de harina de soja, pero las procesadoras que se encuentran en las orillas del río Paraná, su principal vía de embarque, están trabajando a solo la mitad de su capacidad debido a las consecuencias de la guerra comercial entre Estados Unidos y China.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, se reunirán en la cumbre del G-20 en Buenos Aires para conversar sobre la disputa comercial.

    Pekín ha aplicado un arancel de un 25 por ciento a las importaciones de soja en Estados Unidos. El excedente resultante de soja barata en Estados Unidos ha reducido los costos de insumos para las plantas procesadoras locales, lo que las ha hecho más rentables frente a sus pares de Argentina.

La apertura de China a la harina argentina sería una bendición para el país sudamericano, cuyas grandes plantas de procesamiento ubicadas entre la Pampa y los puertos de aguas profundas del Paraná lo convierten en el lugar más eficiente del mundo para procesar la soja.

     “El Gobierno confía en que las negociaciones avanzarán, pero las cosas van lentamente”, dijo Zubizarreta, y agregó que no ha habido avances en el registro de plantas ante las autoridades chinas.

     “Estamos presionando para avanzar en todos los pasos, incluida la inspección y el registro de las plantas de molienda de soja argentinas por parte de las autoridades chinas. La pelota está en su cancha”, señaló.



Jamileth