Internacional - Política

El Parlamento de Venezuela ofrece la amnistía a los militares y chavistas que se enfrenten a Maduro

2019-01-16

"Se busca un quiebre en las Fuerzas Armadas. Esto puede llevar a unos niveles de...

Por DANIEL LOZANO, El Mundo

La Asamblea Nacional no cede en su pulso contra Nicolás Maduro, a quien en una decisión histórica declaró "usurpador", además de repudiar sus decisiones ejecutivas y calificarlas como nulas. Empeñado en buscar una salida política a la descomunal crisis económica que sufre el país, el Parlamento aprobó la puesta en marcha de un "marco legislativo para la transición política y económica, (...) un proceso progresivo y temporal de transferencia de las competencias del poder ejecutivo al legislativo".

Un reto al chavismo en toda regla, que contempla como medida estrella la confección de una ley de amnistía para militares y civiles chavistas que se atrevan a enfrentar al 'hijo de Chávez' y colaboren en el "restablecimiento de la democracia". El proyecto de ley ha pasado a la Comisión de Política Interior del Parlamento, donde será tramitado con urgencia, tal y como sugirió Leopoldo López, líder opositor y preso político, en un audio que se filtró a las redes sociales. Se trata de un guiño para animar las deserciones, pese a tratarse de una iniciativa legislativa que, cuando esté redactada y aprobada, el poder ejecutivo ignorará como ha hecho con todas las leyes desde enero de 2016.

"Se busca un quiebre en las Fuerzas Armadas. Esto puede llevar a unos niveles de presión que provoquen una ruptura de la coalición de gobierno o nos conduzca a una guerra", vaticinó Piero Trepiccione, politólogo cercano a los jesuitas.

Los militares se han convertido en la principal base de apoyo que sostiene a Maduro, de ahí el constante cortejo que mantiene el jefe revolucionario, quien el martes compareció en Fuerte Tiuna, vestido de verde oliva, para supervisar las maniobras militares del mes que viene. Maduro les exigió "defender a su Gobierno de los imperios" y el general Vladimir Padrino López, ministro de Defensa, le contestó que están "dispuestos a morir" para defenderle.

La revolución acusó el miércoles a EU de incitar a la violencia, después de que su secretario de Estado, Mike Pompeo, aplaudiera las decisiones del Parlamento. "Pompeo, no conforme con liderar un criminal bloqueo económico y una operación de agresión internacional contra Venezuela, ahora promueve descaradamente un golpe de Estado", acusó el canciller chavista, Jorge Arreaza.

"La Asamblea Nacional intenta construir una viabilidad política, pero Maduro y las Fuerzas Armadas han cerrado todo tipo de posibilidad de negociación seria", sentenció Trepiccione.

La estrategia de presión, orquestada a la vez por factores internos y externos, incluye también la petición de congelamiento de fondos, cuentas y activos del estado venezolano a la Unión Europea, a los países de la región más EU, Canadá, Rusia, China, Turquía y los Emiratos Árabes. El Parlamento busca que sus países aliados no permitan al Gobierno mover sus fondos amparándose en su "ilegitimidad".

"En el caso de la UE se requiere una decisión unánime de todos los países miembros a través del Consejo Europeo", detalló a EL MUNDO el internacionalista Mariano de Alba.

La confrontación directa del Parlamento, a quien el chavismo declaró en desacato para arrebatarle sus poderes legislativos, prosigue sin necesidad de que su presidente, Juan Guaidó, sea juramentado públicamente como presidente encargado del país. Así se lo exigen sectores radicales de la propia oposición, que incluso se abstuvieron en la votación que declaró "usurpador" al 'hijo de Chávez'.

El Parlamento ha convocado una marcha para el 23 de enero, con la intención de recuperar la presión en la calle, perdida hace 16 meses. En los cabildos abiertos que se celebran estos días se ha multiplicado la asistencia popular, pero todavía muy lejos del apoyo que en septiembre de 2016 y abril de 2017 reunió a más de un millón de personas en Caracas. 

El chavismo, que escenifica el apoyo a su líder con la presencia forzada de empleados públicos y con beneficiados de sus programas de control social, ha contraprogramado para ese mismo día tres marchas en la capital.



regina