Internacional - Política

Extrema derecha francesa, reforzada en comicios tras ataques

2015-12-07

Por ELAINE GANLEY

PARIS (AP) — Las opciones electorales en Francia ya no son tan simples como izquierda y derecha. El Frente Nacional de extrema derecha ha capitalizado el enojo contra la migración y los ataques de extremistas para meterse en la corriente política principal, donde según expertos se mantendrá.

Los resultados históricos del partido el domingo durante la primera ronda de elecciones regionales fue la más reciente de una serie de incursiones electorales, con logros que humillaron y desestabilizaron a los partidos tradicionales. El Partido Conservador del expresidente Nicolas Sarkozy y el Socialista del presidente Francois Hollande —los partidos largamente dominantes de la visa política francesa— buscan desordenadamente las maneras de bloquear el ascenso de la extrema derecha antes de la ronda final electoral a realizarse el 13 de diciembre.

Los logros del Frente Nacional —que ganó seis de 13 regiones— vigorizarán a su líder Marine Le Pen en la búsqueda de la presidencia del país en 2017. En la tradicionalmente socialista región noreste de Francia donde ella está compitiendo, el partido obtuvo más de 40% de los votos. Su sobrina Marion Marechal-Le Pen tuvo un resultado similar en Provenza-Alpes-Costa Azul, en el sureste de la nación, una plaza fuerte de la derecha tradicional.

En un intento por detener una victoria del Frente Nacional en la segunda ronda, el Partido Socialista ordenó a sus candidatos retirarse de la contienda en dos regiones para que sus partidarios pudieran dar sus votos a candidatos conservadores, un ejercicio amargo que el primer ministro Manuel Valls dijo que era necesario.

"Existe una opción entre dos visiones de Francia", dijo Valls la noche del lunes en el canal de televisión TF1: la de los partidos tradicionales y aquella de la extrema derecha, "la cual divide a los franceses, la que trata de enfrentar a unos contra otros".

Opositores dicen que el Frente Nacional critica sin ofrecer soluciones. El partido, que actualmente tiene cuatro legisladores en el Parlamento, se opone a la Unión Europea y al euro, y teme que inmigrantes musulmanes sustituirán a la civilización francesa. Pero Le Pen dice que su partido es de patriotas, un mensaje con especial resonancia en una Francia con los nervios de punta desde los ataques del 13 de noviembre en París que mataron a 130 personas.

Marine Le Pen reemplazó en 2011 a su padre, el fundador del partido Jean-Marie Le Pen. Ella comenzó inmediatamente a cambiar la imagen antisemita del partido para hacerlo menos tóxico a los votantes y revertir su estatus de indeseable.



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