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Fabricantes de automóviles intentan calmar a Trump con inversiones en EU


2017-01-10

 

Detroit (EU), 10 ene (EFE).- Varios de los principales fabricantes de automóviles han anunciado inversiones en Estados Unidos en un intento por calmar al presidente electo, Donald Trump, quien ha amenazado con imponer aranceles aduaneros a las importaciones de vehículos producidos en México.

El presidente de Toyota, Akio Toyoda, el último fabricante que fue objeto de las amenazas por Twitter de Trump, declaró este lunes durante su intervención en el Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica (NAIAS), en Detroit, que la compañía invertirá 10,000 millones de dólares en EU en los próximos cinco años.

La semana pasada Trump recurrió a Twitter para amenazar con elevados aranceles aduaneros a Toyota cuando el presidente electo se enteró de los planes anunciados hace meses por la compañía de invertir en una nueva planta de montaje en México.

Toyoda volvió a recordar la contribución de Toyota en Estados Unidos a la vez que avanzó la inversión en el país.

"Tenemos 136,000 empleados aquí en Estados Unidos. Hemos invertido 22,000 millones de dólares en EU en los pasados 60 años e invertiremos otros 10,000 millones sólo en los próximos cinco años", explicó Toyoda durante su visita a Detroit.

Antes de la apertura del salón, Ford, que fue el primer fabricante en sentir la ira tuitera de Trump, anunció la cancelación de la construcción de una planta de montaje en San Luis Potosí (México), una inversión de 1,600 millones de dólares.

Ford también anunció la inversión de 700 millones de dólares en la fábrica estadounidense de Flat Rock (Michigan).

Y el lunes, en NAIAS, el presidente de Ford para el continente americano, Joe Hinrichs, al anunciar la próxima comercialización de dos nuevos modelos, el todocaminos SUV Bronco y la camioneta Ranger, recalcó que serán producidos en la planta de montaje de Michigan.

Tras ver las amenazas de Trump a Ford, General Motors (GM) y Toyota, el tercer fabricante estadounidense, Fiat Chrysler (FCA), se anticipó al presidente electo y en la noche del domingo anunció de forma inesperada una inversión de 1,000 millones de dólares en Michigan y Ohio que creará 2,000 empleos.

Aunque el presidente de FCA, Sergio Marchionne, declaró en el salón que la inversión estaba planeada desde hace tiempo y que no era una respuesta a Trump, el presidente electo no desaprovechó la oportunidad.

"Finalmente está ocurriendo: Fiat Chrysler acaba de anunciar planes para invertir 1,000 MILLONES de dólares en sus plantas de Michigan y Ohio, creando 2,000 puestos de trabajo", afirmó Trump en Twitter antes de agradecer a FCA y Ford sus decisiones.

De momento, General Motors (GM) es el único fabricante que ha resistido a las amenazas de Trump aunque a mediados de diciembre anunció la inversión de 552 millones de dólares en varios centros de producción en Estados Unidos.

GM, que en NAIAS ha confirmado que dejará de producir el todocaminos SUV GMC Terrain en Canadá en favor de su montaje en la planta mexicana de San Luis Potosí, afirmó que no cambiará sus planes de producción.

"Tenemos más de 40 plantas de producción en Estados Unidos y sólo en los dos últimos años hemos invertido más de 11,000 millones de dólares para crear miles de nuevos empleos en Estados Unidos además de reclutar talento técnico", dijo en NAIAS la consejera delegada de GM, Mary Barra.

Por su parte Nissan y Honda, que también producen en México y Canadá vehículos que son exportados para su venta en Estados Unidos, aunque no han anunciado inversiones en el país si han destacado su contribución a la economía local.

Por ejemplo, Honda explicó que el 95 % de los vehículos que vende en Estados Unidos son montados localmente.

De momento, el gran perdedor de la fijación de Trump con el sector del automóvil es México, porque el tercer socio del criticado Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Canadá, donde se producen miles de vehículos para su venta en EU, ha escapado a las amenazas del presidente electo.

Aunque Trump ha declarado que los fabricantes tienen que producir en Estados Unidos los vehículos que venden en el país, y que por eso quiere imponer aranceles de hasta el 35 % a la importación de automóviles producidos en México, el presidente electo no ha dicho nada sobre la producción canadiense.

El periódico canadiense "The Globe and Mail" publicó hoy que la razón puede ser las supuestas conversaciones que el Gobierno canadiense ha mantenido con los asesores de Trump para evitar una "guerra comercial".

Según el rotativo canadiense, destacados funcionarios canadienses se han reunido en varias ocasiones en Washington con Jared Kushner, el influyente yerno de Trump, y Stephen Bannon, su director estratégico, como parte de una ofensiva de Ottawa para evitar enfrentamientos con la futura administración Trump.



JMRS


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