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Reunión Estados Unidos-México en medio de tensiones por Trump


2017-02-22

 

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — México y Estados Unidos sostendrán importantes reuniones de alto nivel el miércoles en medio de tensiones provocadas por la retórica del presidente Donald Trump de construir un muro entre los dos países, deportar a inmigrantes y limitar el comercio.

El secretario de Estado, Rex Tillerson, y el de Seguridad Nacional, John Kelly, están viajando al país vecino, cuyo gobierno está reevaluando sus relaciones con Washington.

Las relaciones entre las dos naciones se han deteriorado marcadamente desde que Trump asumió la presidencia. Trump ha prometido erigir un muro en la frontera entre los dos países y obligar a México a pagar por ello; ha prometido duras medidas contra la inmigración ilegal y una reforma radical en la relación comercial.

Tillerson llegará el miércoles por la tarde a Ciudad de México, mientras Kelly — cuyo departamento estará a cargo de implementar las medidas contra la inmigración ilegal— arribará desde Guatemala. Ambos tienen agendadas reuniones con el presidente Enrique Peña Nieto y otros funcionarios.

El tono de la visita se asemeja al de recientes misiones diplomáticas, en que emisarios de Trump tratan de tranquilizar a líderes de otros países inquietos por la retórica nacionalista del mandatario. Ya lo hicieron el vicepresidente Mike Pence y el secretario de Defensa, Jim Mattis, ante líderes extranjeros que han recibido con escepticismo el discurso conciliatorio ante las declaraciones beligerantes de Trump.

Tillerson, ex director ejecutivo de Exxon Mobil, y Kelly, un general retirado de la Infantería de Marina, han ofrecido un discurso más diplomático hacia México que el de Trump, aunque serán los responsables de implementar una política que ha suscitado intenso rencor en el país vecino.

El martes, el gobierno estadounidense cambió las normas migratorias de tal manera que será más fácil deportar a muchas más personas que están viviendo ilegalmente en Estados Unidos, entre ellas millones de mexicanos. Mientras el gobierno de Barack Obama se concentraba en deportar a inmigrantes hallados culpables de delitos graves, las nuevas normas permiten deportar a todo el que sea hallado culpable de algún delito, incluso de infracciones menores.

Las nuevas reglas además estipulan que se podrá deportar a México a inmigrantes aunque no sean mexicanos. Se propone aumentar la capacidad de confinamiento de los centros de detención de inmigrantes y se anuncia el inicio de la planificación para el muro que Trump ha prometido.

Tales medidas han causado gran consternación en México. Sin embargo, el gobierno de Trump insiste en que los dos vecinos pueden tener una relación productiva, en base a la cooperación económica y en otras áreas.

Trump no tenía ni una semana en el cargo cuando Peña Nieto canceló una visita a Washington. El presidente estadounidense había dicho que no valía la pena reunirse si México se negaba a pagar por el muro, un proyecto que muy probablemente ascenderá a miles de millones de dólares. No se ha programado otra reunión entre los dos mandatarios.



JMRS


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