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Legisladores se reúnen por seguridad fronteriza contra reloj para evitar paralización

2019-02-11

Por Richard Cowan y Susan Cornwell, Reuters

WASHINGTON (Reuters) - Los cuatro principales negociadores demócratas y republicanos en el Congreso de Estados Unidos retomaron el lunes las conversaciones sobre la financiación de la seguridad fronteriza, ante la posibilidad de otra paralización del Gobierno federal si no llegan a un acuerdo antes de la fecha límite del viernes.

Las conversaciones, que se interrumpieron durante el fin de semana, se reanudaron en el Capitolio horas antes de un mitin en la ciudad fronteriza de El Paso, Texas, donde el presidente Donald Trump promocionará su prometido muro a lo largo de la línea limítrofe entre México y Estados Unidos, una propuesta a la que los demócratas se oponen.

Los congresistas esperan llegar a un acuerdo para dar tiempo a que la ley pase a la Cámara de Representantes y al Senado y que sea homologada para el viernes, cuando vence el financiamiento para varias agencias federales.

Trump, quien en diciembre dijo que estaría “orgulloso” de paralizar el Gobierno federal por la seguridad de la frontera, tomó una táctica diferente el lunes. “Depende de los demócratas”, dijo el mandatario a periodistas en la Casa Blanca cuando se le preguntó si el gobierno sufriría un nuevo cierre.

Las conversaciones se estancaron el fin de semana por la financiación de barreras físicas a lo largo de la frontera y una propuesta demócrata que busca reducir los espacios asignados a personas que enfrentan la deportación en centros de detención de inmigrantes.

Los demócratas se oponen a que el gobierno de Trump amplíe su capacidad de retener a más personas arrestadas por agentes de Inmigración y Control de Aduanas para que eventualmente sean deportados.

La demanda de Trump en diciembre de 5,700 millones de dólares para construir un muro fronterizo provocó un cierre parcial del gobierno de 35 días que terminó el mes pasado sin que el mandatario obtuviera fondos para el proyecto.

Trump acordó reabrir el gobierno durante tres semanas a fin de permitir que los negociadores del Congreso lleguen a un acuerdo sobre el financiamiento gubernamental para el resto del año fiscal, que concluye el 30 de septiembre, y así evitar otro cierre el 15 de febrero.

Trump hizo del muro fronterizo una de sus promesas centrales de campaña, asegurando que era necesario para frenar la inmigración ilegal, el narcotráfico y otros delitos. Los demócratas, que asumieron el control de la Cámara de Representantes, dicen que el muro es poco efectivo, costoso e inmoral.