La honestidad del PAN
La historia negra del paso de los panistas por la impartición de justicia comenzó en el gobierno de Zedillo con Antonio Lozano quien ocupó la Procuraduría General de la República.
La historia negra del paso de los panistas por la impartición de justicia comenzó en el gobierno de Zedillo con Antonio Lozano quien ocupó la Procuraduría General de la República.
El nuevo presidente de la Argentina tendrá que gobernar un país pobre, en el que uno de cada diez habitantes pasa hambre. Su gestión tendrá poco tiempo para mostrar cómo puede resolver esta urgencia.
Hasta ahora. Boris Johnson, el candidato más iconoclasta que ha tenido la política británica en décadas, había decidido que no bebería de ese cáliz.
Un doctor que fuma un cigarrillo tras otro en su consultorio mientras atiende a su paciente; la esposa impecable que termina el pícnic familiar sacudiendo el mantel de cuadros y deja sembrado de vasos y platos desechables un pasto prístino. Escenas de película o series de televisión ambientadas...
Ha terminado el primer año en el poder de Andrés Manuel López Obrador. Y a despecho de la fe ciega de algunos y el temor paranoide de otros, México sigue más o menos donde estaba antes del 1 de diciembre de 2018.
Si el entorno de López Obrador temía que Evo Morales cargara contra el vecino del norte y utilizara la 4T para continuar su proselitismo político, debe saber que cambió de tema cuando le preguntaron de forma expresa si Estados Unidos estaba tras el golpe.
En Bolivia se rompió el orden constitucional cuando las Fuerzas Armadas le recomendaron a Evo Morales que renunciara a la Presidencia. Con el último respaldo que tenía para aferrarse al poder, Morales dimitió y junto con él las tres personas que seguían en la línea de sucesión...
El asilo político por razones humanitarias a Evo Morales ha colocado a México al frente de los Gobiernos progresistas de América Latina. Un liderazgo que el Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador se había rehusado a aceptar desde que asumió la presidencia hace un año.
La dimisión del presidente de Bolivia, Evo Morales, y de su vicepresidente, Álvaro García Linera, refleja la extrema gravedad del enfrentamiento social que vive el país andino a raíz de las denuncias de fraude en las elecciones presidenciales celebradas el 20 de octubre.
Durante los momentos más duros de Andrés Manuel López Obrador, en las derrotas de 2006 y 2012, desahuciado por su partido, por los medios y por buena parte de la sociedad mexicana por su terca resistencia ante los reveses electorales, sólo un pequeño grupo permaneció a su lado.
La violación sistemática de los derechos humanos no puede ponerse ya en duda desde que la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, publicó su bien averiguado e incontrovertible informe.
El pasado 4 de septiembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró, pues se ha vuelto una constante en sus conferencias matutinas, la necesidad de “no permitir la corrupción en jueces, en magistrados”.
El tema más debatido es lo establecido en la Constitución General de la República que puntualiza que quien integra ese Poder, al renunciar, debe argumentar la gravedad para tomar esa decisión, lo cual no hizo el exministro.
El ambiente es a ratos de mitin político, a ratos de prédica religiosa con pizcas de curso de autoayuda y a ratos, futbolero, como cuando el fondo de la sala grita con orgullo: “Soy conservador, soy conservador”, “Nuestra bandera nunca será roja” o “Lula, ladrón, tu sitio es la prisión”.
Imposible olvidar que según el Fondo Monetario Internacional, la economía de todo el mundo va a crecer un 3,2% en promedio, en este mismo año, Asia en un 6,2%, la África subsahariana un 3,4% y la del Medio Oriente, norte de África, Afganistán y Pakistán en un 3,4%...
Perú vivía una parálisis legislativa provocada por el bloqueo de la oposición fujimorista —con mayoría en el Congreso— agravada además por el intento de esta de modificar la composición del Tribunal Constitucional mediante el nombramiento de magistrados afines.
Bien reza el refrán popular al afirmar que “nadie escarmienta en cabeza ajena”. Me refiero a nuestra incapacidad de aprender de los errores cometidos por terceros.
Logró frenar las ansias de los demócratas más enfurecidos tras la presentación del informe Mueller, que no encontró pruebas determinantes contra Trump y su supuesta connivencia con Moscú en las elecciones presidenciales de 2016.
Mohamed Bin Salmán, el impetuoso príncipe heredero de Arabia Saudí y auténtico gobernante del reino del desierto, está en horas bajas.
La misoginia del presidente de Brasil, que ha avinagrado la relación con Francia, es una parte esencial de su proyecto de poder. La elección de un hombre de extrema derecha que ya ha dicho que quiere acabar con las minorías es consecuencia de una época en que movimientos como el #MeToo...
Nadie va a lamentar que este huracán se haya ido. El dolor es que llegara. Su paso durante 17 meses por la Casa Blanca ha añadido el riesgo máximo a una presidencia que es ella misma un riesgo permanente e insuperable.
Aunque la decisión será recurrida por el Gobierno de Johnson y pasará a un tribunal de mayor rango en Londres, constata cómo el primer ministro ha retorcido el espíritu de la ley para aplicar una medida como la suspensión del periodo de sesiones en un sentido para el que jamás fue diseñada.
El pasado domingo 1º de septiembre en cumplimiento a lo que establece el texto constitucional y en representación del Presidente de la República, la Secretaria de Gobernación entregó al Congreso de la Unión el primer informe de gobierno de la presente Administración.
El presidente Andrés López Obrador avaló el anuncio del jefe criminal Joaquín "El Chapo" Guzmán para que la riqueza que le sea confiscada por el gobierno de Estados Unidos pase a manos de las comunidades pobres e indígenas de su país.
El Parlamento británico no se dejó impresionar este martes con la popularidad de Boris Johnson ni se amilanó ante sus bravuconadas.
La victoria del Partido Socialdemócrata en Brandeburgo y de la democristiana CDU en Sajonia muestra que el electorado alemán, aunque en menor medida, sigue confiando en las formaciones que han garantizado la gobernabilidad y el progreso del país desde el final de la contienda mundial.
Somos televidentes –espectadores a la distancia- de una escena traumática repetida hasta el hartazgo y nuestra capacidad de concebir una nueva imagen insurrecta parece haber quedado obturada en ese mismo bucle de frustración revolucionaria.
Margaret Thatcher dejó escrito en sus memorias cómo, al comienzo de las negociaciones para la transferencia de soberanía de Hong Kong, Deng Xiaoping aspiraba a que el territorio se reincorporara a China como una provincia más, llegando incluso a amenazar con “tomar la isla en un día”.
Con su pelo rubio cardado, sus aires sureños y su profunda fe en las ideas conservadoras del Partido Republicano, podría ser un trasunto de una Doris Day o incluso una Betty Ford cualquiera.
Rosario Robles mostraba enjundia al iniciar la semana. “Estoy aquí para demostrar mi inocencia y confío plenamente en la autonomía del Poder Judicial”, dijo el martes por la tarde, minutos antes de comparecer por segunda ocasión ante el juez.
Esa noche del 2 de julio del año 2000, en la explanada del Instituto Federal Electoral gritamos, lloramos, nos abrazamos. Repetíamos sin cesar: “logramos sacar al PRI de Los Pinos”. “Logramos una transición votada”. Eran momentos de algarabía, de triunfo compartido.
La palabra fetiche es "volver". Como en la canción. "Volvé Cristina", grita la multitud. "Quiero que la gente vuelva a ser feliz", dice ella desde el escenario.
El debate público mexicano ha caído en el uso de ciertas palabras que sirven de tapadera de nuestras verdaderas contradicciones. El “estado de derecho” oculta las injusticias con su sola mención. La “democracia”, las desigualdades y los niveles de violencia que viven sus ciudadanos.
El presidente de Brasil es perverso, un tipo de persona que solo mantiene los dientes (temporalmente, al menos) lejos de quienes son de su sangre o de quienes le menean el rabo a sus ideas. Y solo mientras estén meneando el rabo: si paran, también los mastica.
Es difícil escuchar un pronunciamiento de Nicolás Maduro sin una referencia a la noción de imperialismo, un saco en el que el mandatario chavista suele meter todo lo que se aleja de su proyecto político.