La creciente preocupación por una recesión tras unos datos económicos más débiles y las expectativas de que la Reserva Federal siga subiendo las tasas de interés para contener la inflación provocaron salidas de fondos de renta variable mundial en la semana que finalizó el 19 de abril.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció este jueves una nueva subida de la tasa de interés de referencia, del 78 al 81 %, en medio de la escalada que en los últimos días viene dándose en la cotización informal del dólar y del escenario de altísima inflación que arrastra el país.
Ante estas turbulencias, la Fed anunció el mes pasado una subida de los tipos de interés de 0,25 puntos para situarlos en una horquilla de entre el 4,75 % y el 5 %, aunque su presidente, Jerome Powell, anticipó que puede que esos aumentos no sean adecuados para contener la inflación.
En otros mercados, el petróleo de Texas cerró en 79,16 dólares el barril, y al término de la sesión bursátil la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años subían al 3,598 %, el oro bajaba a 2.006 dólares la onza, y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,0952.
JPMorgan Chase anunció unos beneficios en el primer trimestre de 12.622 millones, un 52 % más; Citigroup ganó 4.606 millones entre enero y marzo, un 7 % más que en el mismo periodo de 2022 y Wells Fargo logró unos beneficios de 4.991 millones en los tres primeros meses del año, un 32 % más.
De las 30 principales empresas del índice Dow, destacaba la caída de Johson&Johnson (-2,81 %), que hoy presentó unos resultados trimestrales lastrados por las indemnizaciones debidas a sus famosos polvos de talco ya retirados del mercado, o las de Verizon (-1,32 %).
"Todo ello en un contexto en el que el mercado financiero, que estaba acostumbrado a bajos tipos de interés y a veces (tipos) negativos en Europa, sufre una gran transformación de su entorno, con los tipos subiendo a una velocidad no vista en décadas, algo que no fue anticipado", agregó.
En otros mercados, el petróleo de Texas cerró en 80,83 dólares el barril, y al término de la sesión bursátil la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años subían al 3,606 %, el oro bajaba a 2.008 dólares la onza, y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,0926.
Los clientes de Credit Suisse Group AG retiraron US$4,400 millones de fondos en Estados Unidos y Europa desde que el banco acordó el mes pasado su adquisición por parte del rival UBS Group AG, y recientes entradas sugieren que es posible que ya haya pasado lo peor de este éxodo.
De hecho, el informe bimensual de la Universidad de Michigan sobre la confianza de los consumidores puso de manifiesto el viernes los obstáculos a los que se enfrenta la Fed en este frente y reforzó el argumento en contra de una pausa en el ciclo de endurecimiento de la política monetaria.
Por sectores, los ganadores de la semana fueron claramente el financiero, que subió casi un 3 % acumulado, seguido por el de la energía, un 2,5 %, el de bienes no esenciales, un 2,3 %, o el industrial, un 1,8 %, mientras que uno de los más perjudicados fue el inmobiliario (-0,90 %).
A raíz de la crisis, los principales responsables económicos del país, y en particular la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, y el presidente de la Fed, Jerome Powell, han tratado de asegurar a los ciudadanos y a los mercados que la situación no desembocará en una crisis financiera.
Tres de los principales bancos estadounidenses -JPMorgan, Citigroup y Wells Fargo- anunciaron este viernes ganancias en sus resultados trimestrales pese a la crisis de confianza que está atravesando el país tras la turbulencia bancaria del mes pasado.
JPMorgan Chase, el mayor banco por activos de Estados Unidos, obtuvo un beneficio neto de 12.622 millones de dólares en el primer trimestre del año, un 52 % más interanual, con unos ingresos récord de 38,000 millones, en un momento en que los inversores miran con lupa al sector bancario.
Berkshire posee decenas de empresas aparte de BNSF, como la aseguradora Geico, grandes empresas de servicios públicos y una variedad de negocios de manufactura y ventas. Tiene más de 300,000 millones de dólares en inversiones, con grandes inversiones en Apple y Coca-Cola.
Otros empleados de Wall Street se han hecho eco de la opinión. Desde que la pandemia de COVID-19 empezó a remitir, los bancos han intentado de forma agresiva volver al entorno de oficina anterior a la pandemia, pese a que otros en el mundo corporativo han adoptado modelos de trabajo híbridos.
Para los cinco bancos más grandes de Wall Street —grupo que incluye a JPMorgan, Bank of America, Citigroup Inc., Goldman Sachs Group Inc. y Morgan Stanley—, se prevé que los ingresos por negociaciones totales caigan US$3,200 millones, o el 10%, a US$29,900 millones.
Esas firmas también han dicho que la reciente agitación del mercado ha contribuido a extender la desaceleración en los negocios de negociación y mercados de capital. En las cinco compañías más grandes, se espera que dichas tarifas bajen un 25% con respecto a los niveles ya bajos del año pasado.
"Los riesgos de no subir las tasas lo suficiente superan con creces el endurecimiento excesivo, por lo que es probable que la Reserva Federal siga adelante con la subida de tasas de un cuarto de punto, ya que el IPC subyacente lo justifica", dijo Edward Moya, analista de mercados de OANDA.
Esos movimientos a la baja se produjeron después de que las minutas de la reunión de la Fed de marzo mostraran que los funcionarios temían que la economía pudiera caer en una leve recesión a finales de este año a raíz de la crisis bancaria que se vio en Estados Unidos el mes pasado.
