REFLEXIONES
Los niños, víctimas inocentes de una guerra infrahumana, sin piedad ni misericordia
La rabia de la guerra, la sed de venganza nunca puede dejarnos ciegos ante el llanto de un niño, de miles de niños que sufren, que mueren. Los gobernantes quieren victorias rápidas, no tienen paciencia de separar la cizaña del trigo, y en su ineptitud exterminan niños inocentes junto con enemigos,