Los ingenios azucareros brasileños están observando de cerca la cosecha de maíz de Estados Unidos en 2019, atentos a reducciones de cosechas que puedan elevar los precios del cereal y los de producir etanol, lo que abre un margen para que el combustible brasileño gane cuota de mercado.
Lluvias abundantes en la mayoría de las áreas productoras de azúcar y café en Brasil esta semana podrían demorar tareas de cosecha, pero los pronósticos indican que las precipitaciones se detendrán al final de esta semana y seguirá un período prolongado de sequía.
Los ingenios azucareros del centro-sur de Brasil extendieron sus operaciones de procesamiento de caña para la cosecha actual debido a las lluvias generalizadas en la mayor parte de esa zona, dijo el martes un importante grupo industrial del sector.
La zona azucarera por excelencia del centrosur de Brasil producirá 26,38 millones de toneladas en la temporada 2018/19, que está llegando a sus últimas semanas, la menor cantidad en 12 años debido a una menor cosecha de caña y a una mayor producción de etanol, dijo el martes la consultora Datagro.
Un alto funcionario cubano instó a los trabajadores de la industria azucarera de su país a producir más de 1,7 millones de toneladas de azúcar sin refinar durante la cosecha 2018-2019, informó la televisión estatal, después de los malos resultados en la temporada precedente en la isla.
Recorrer la planta de la hacienda azucarera San Carlos es pasear por un enredo de tuberías calientes, escaleras metálicas y un acertijo de maquinaria compleja que funciona sola. Encaja a la perfección en el cliché imaginado de industria gris y ruidosa. Pero huele dulce. Tanto que empalaga.
La producción de azúcar de México en la cosecha 2018/2019 alcanzaría alrededor de 6 millones de toneladas gracias al buen clima, estimó el miércoles Humberto Jasso, presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera.
También observó las tendencias mundiales, entre ellas el aumento de la tensión comercial entre Estados Unidos y China y el persistente exceso de azúcar en el mercado. Luego desarmó el último de sus campos de caña y abandonó un contrato de suministro de décadas con un ingenio azucarero local.
