Wall Street cayó el martes, ya que los inversores se preocuparon por una debilitada confianza del consumidor, decepcionantes resultados corporativos y la lucha en el Congreso de Estados Unidos para alcanzar un paquete de ayuda por el coronavirus.
Las aerolíneas mundiales redujeron el martes su pronóstico de recuperación del coronavirus, indicando que el tráfico aéreo de pasajeros volvería a los niveles previos a la crisis en 2024, un año más tarde de lo previsto anteriormente.
El oro al contado XAU= anotó un máximo histórico de 1.945,16 dólares la onza, y escaló un 1,8% a 1.934,62 dólares a las 1738 GMT. En tanto, los futuros del oro en Estados Unidos GCv1 cerraron con un avance del 1,8% a 1.931 dólares la onza.
Los índices de Wall Street repuntaban el lunes, ya que los inversores pasaban por alto el incremento de casos de coronavirus y las tensiones entre Estados Unidos y China, y apostaban por más estímulos para revivir a la economía al comienzo de una semana atestada con resultados corporativos.
Las monedas y bolsas de valores de América Latina avanzaron el lunes, favorecidas por un retroceso global del dólar, con los inversores a la expectativa de la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos esta semana y de la evolución de la pandemia de coronavirus.
Las acciones europeas cayeron, pese a que datos mostraron que la actividad empresarial en la zona euro retornó al crecimiento. La actividad manufacturera alemana evitó la contracción por primera vez en 19 meses en julio con un notable repunte en las ventas externas.
Las monedas y bolsas de valores de la región tuvieron un cierre dispar la jornada del viernes en medio de una mayor aversión al riesgo ante una escalada en la tensión entre China y Estados Unidos, luego que el país asiático tomara represalias tras el cierre de su consulado en Houston.
El oro al contado aumentó un 0,8% a 1.886,09 dólares por onza a las 1806 GMT, luego de tocar más temprano su nivel más alto desde septiembre de 2011 a 1.897,91 dólares. Los futuros del oro en Estados Unidos, en tanto, ganaron un 1,3% a 1.890 dólares la onza.
Los precios de las acciones en Wall Street cayeron el jueves luego de un informe que mostró que los despidos están incrementándose en todo Estados Unidos al aumentar los contagios de coronavirus. En consecuencia, el índice S&P 500 registró su peor pérdida en casi cuatro semanas.
Los precios del oro ganaron el miércoles a máximos de nueve años debido a que una escalada en las tensiones entre Estados Unidos y China avivó la demanda por activos seguros, mientras que la plata siguió con su recuperación para alcanzar un máximo de casi siete años.
Las acciones en Estados Unidos subieron el miércoles tras una sesión volátil, en la que los inversores asimilaron resultados trimestrales dispares y unas duras negociaciones en Washington sobre nuevos estímulos.
El S&P 500 subió levemente el martes, en una sesión en que los inversores apostaron por las acciones cíclicas ante el optimismo de que Washington inyectará una nueva ronda de estímulo para apoyar la recuperación económica de Estados Unidos a raíz de los efectos de la pandemia.
Los precios del oro avanzaron el lunes a sus máximos desde septiembre de 2011, y la plata tocó su mayor nivel en cuatro años, ya que el aumento de casos de COVID-19 y expectativas de más medidas de estímulo respaldaron la demanda por activos seguros.
La mayoría de las bolsas de valores y monedas de la región cerraron al alza el lunes, debido a que expectativas de más medidas de estímulo para impulsar a la alicaída economía mundial contrarrestaron los efectos de un aumento a nivel mundial en los casos de coronavirus.
Las acciones de tecnología llevaron al Nasdaq a cerrar en nivel récord en una sesión de avances en Wall Street, ya que los prometedores resultados de ensayos para posibles vacunas contra el COVID-19 llevaron a los inversores a mirar más allá del repunte de nuevos casos de la enfermedad.
International Business Machines Corp superó el lunes las estimaciones de ganancias del segundo trimestre, al tiempo que destacó que la demanda en su negocio de computación en nube se verá impulsada a medida que las multinacionales aceleran el cambio digital debido a la crisis del coronavirus.
“Las tasas de interés reales negativas, el aumento de los balances de los bancos centrales, la debilidad del dólar y los casos aún en aumento de COVID-19 están aumentando el atractivo del metal amarillo como activo seguro”, dijo Soni Kumari, analista de materias primas de ANZ.
De este modo, en los seis primeros meses del año la compañía ha ganado 26 millones de abonados, frente a los 28 millones sumados a lo largo de todo el ejercicio 2019, alcanzando los 192,9 millones de suscriptores.
La mayoría de mercados de América Latina cerraron el jueves con caídas, ante las renovadas preocupaciones en torno a la evolución de la pandemia de coronavirus y a la tensión entre Estados Unidos y China tras las restricciones impuestas por Washington a los empleados de Huawei.
El oro cayó bajo los 1,800 dólares por onza el jueves, ya que el dólar se fortaleció y el Banco Central Europeo mantuvo su política monetaria, lo que llevó a algunos inversores a recoger ganancias.
