El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha disparado críticas al candidato Alberto Fernández desde que el resultado de las primarias argentinas lo puso más cerca de la Casa Rosada.
El gobierno de Jair Bolsonaro prohibió este martes el ingreso a suelo brasileño de “altos funcionarios” del régimen de Nicolás Maduro por considerar que atentan contra la democracia y los derechos humanos.
Brasil está viviendo, según analistas nacionales e internacionales, un clima político de prenazismo, mientras la oposición progresista y democrática brasileña permanece muda.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo el miércoles que Argentina se dirige a un caos porque los “bandidos izquierdistas” que brillaron en las elecciones primarias del domingo seguirán el camino de Venezuela, que enfrenta una profunda crisis económica.
Sus exjefes políticos, Néstor Kirchner y sobre todo Fernández de Kirchner, establecieron a nivel regional una alianza con Venezuela, primero con Hugo Chávez y luego con su sucesor, Nicolás Maduro. Macri ha dicho que si el kirchnerismo vuelve al poder, Argentina “se convertirá en Venezuela”.
El candidato opositor de centroizquierda Alberto Fernández, quien el domingo logró una abrumadora diferencia sobre el mandatario neoliberal Mauricio Macri en las primarias de Argentina, criticó el lunes al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, a quien calificó de “racista, misógino y violento”.
El ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, quien estuvo a cargo de la mayor investigación por corrupción del país como juez federal, dijo el lunes que no tiene interés en un cargo de elección popular y que el presidente Jair Bolsonaro es su candidato para los comicios de 2022.
El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, advirtió que su país podría ver una ola de migrantes que huyen de Argentina si una elección presidencial permite que políticos izquierdistas vuelvan al poder en Buenos Aires, luego de que obtuvieron un promisorio resultado en las primarias del domingo.
Los fiscales de Curitiba, el principal frente de investigación de este macrocaso, critican a Dodge por haber paralizado la delación de Léo Pinheiro, expresidente de la constructora OAS y testigo clave en la acusación contra el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva.
Una vez más, el presidente Jair Bolsonaro escarbó en la herida abierta por la dictadura militar brasileña que detentó el poder durante 21 años marcados por la censura, la persecución política, las torturas y muertes.
El presidente Jair Bolsonaro reemplazó el jueves a varios miembros de una comisión que investiga las desapariciones y homicidios ocurridos durante la dictadura en Brasil, días después de que lo confrontaron en torno a la participación del Estado en el asesinato de un activista de izquierda.
El gobierno del presidente Donald Trump ha designado a Brasil como un “aliado importante no perteneciente a la OTAN”, cumpliendo una promesa que hizo al gobernante sudamericano.
Periodistas, artistas, políticos y miembros de la sociedad civil brasileña marcharon el martes en apoyo del editor estadounidense Glenn Greenwald, a quien el presidente Jair Bolsonaro amenazó con enviarlo a prisión por publicar una conversación telefónica.
La teoría dice que un periodista no debe ser noticia. No obstante, en varias ocasiones los focos de todo el mundo se han posado en el reportero de CNN Jim Acosta (Washington D.C., 1971) durante sus preguntas a los presidentes de Estados Unidos.
Bolsonaro ha acusado a esta organización de entorpecer la investigación sobre el apuñalamiento que sufrió en la campaña electoral y ha dirigido sus críticas directamente contra el máximo responsable, Felipe Santa Cruz.
El presidente de Brasil arremetió de nuevo el sábado contra el periodista Glenn Greenwald y advirtió que podría ser sancionado con cárcel, días después de que miembros del partido del mandatario dijeran que la publicación digital del estadounidense está “aliada con hackers delictivos”.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, dijo el jueves que sus teléfonos celulares se encuentran entre los cientos de dispositivos que este año han sido atacados por ciberatacantes, según él, como parte de un elaborado plan que busca afectar al sistema político del país.
El presidente brasileño Jair Bolsonaro denunció el jueves que un grupo de hackers ha intervenido su teléfono.
Criticar obras y políticas públicas relacionadas con la cultura siempre ha estado en el radar del presidente brasileño, Jair Bolsonaro. Durante la campaña, prometía extinguir el Ministerio de Cultura y revisar la Ley Rouanet, que permite captar dinero privado para proyectos culturales...
A Eduardo Bolsonaro, 35 años, diputado, enlace latinoamericano con la alianza global nacionalpopulista y aspirante a embajador en Washington, lo bendijo el mismísimo Trump ante los ojos del mundo.
