COMO ANILLO AL DEDO
Irán y el eje chií
El asesinato de Qasem Soleimani por parte de Estados Unidos es un intento a la desesperada de frenar el creciente expansionismo chií en Oriente Próximo.
El asesinato de Qasem Soleimani por parte de Estados Unidos es un intento a la desesperada de frenar el creciente expansionismo chií en Oriente Próximo.
¿Quién era el general iraní asesinado el 3 de enero? Como figura clave en los esfuerzos expansionistas de su país, su muerte podría instaurar un nuevo capítulo de tensiones geopolíticas en la región.
Los británicos han votado con claridad. Han ratificado en el poder al partido tory, tras una campaña populista de Boris Johnson, bajo el simplista lema Get Brexit done, algo así como Culminemos el Brexit ya, y una feroz agresividad con los inmigrantes.
Hasta ahora. Boris Johnson, el candidato más iconoclasta que ha tenido la política británica en décadas, había decidido que no bebería de ese cáliz.
Si el entorno de López Obrador temía que Evo Morales cargara contra el vecino del norte y utilizara la 4T para continuar su proselitismo político, debe saber que cambió de tema cuando le preguntaron de forma expresa si Estados Unidos estaba tras el golpe.
El asilo político por razones humanitarias a Evo Morales ha colocado a México al frente de los Gobiernos progresistas de América Latina. Un liderazgo que el Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador se había rehusado a aceptar desde que asumió la presidencia hace un año.
La violación sistemática de los derechos humanos no puede ponerse ya en duda desde que la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, publicó su bien averiguado e incontrovertible informe.
El ambiente es a ratos de mitin político, a ratos de prédica religiosa con pizcas de curso de autoayuda y a ratos, futbolero, como cuando el fondo de la sala grita con orgullo: “Soy conservador, soy conservador”, “Nuestra bandera nunca será roja” o “Lula, ladrón, tu sitio es la prisión”.
Logró frenar las ansias de los demócratas más enfurecidos tras la presentación del informe Mueller, que no encontró pruebas determinantes contra Trump y su supuesta connivencia con Moscú en las elecciones presidenciales de 2016.
Mohamed Bin Salmán, el impetuoso príncipe heredero de Arabia Saudí y auténtico gobernante del reino del desierto, está en horas bajas.
Con su pelo rubio cardado, sus aires sureños y su profunda fe en las ideas conservadoras del Partido Republicano, podría ser un trasunto de una Doris Day o incluso una Betty Ford cualquiera.
El presidente de Brasil es perverso, un tipo de persona que solo mantiene los dientes (temporalmente, al menos) lejos de quienes son de su sangre o de quienes le menean el rabo a sus ideas. Y solo mientras estén meneando el rabo: si paran, también los mastica.
El levantamiento que derrocó a los dirigentes de Puerto Rico podría remontarse a un día del presente mes cuando el gobernador, Ricardo Rosselló, ni siquiera estaba en la isla: estaba de vacaciones en Europa, alimentando su Instagram con fotos de él y su esposa sonriendo y disfrutando de París.
No es una labor sencilla lograr que Boris Johnson se haga responsable de sus actos. Basta preguntarle a John Palmer, quien lo intentó hace treinta años, cuando ambos eran reporteros que cubrían temas sobre Europa para periódicos británicos.
Al ya exembajador de Reino Unido en Estados Unidos Kim Darroch le cayó todo el peso de Twitter, es decir, del presidente norteamericano, Donald Trump. Cayó en desgracia tras la filtración de unos memos que remitió a sus jefes en Londres desde 2017.
Bolsonaro no es el primer jefe del Estado que acude al culto semanal en la Cámara, pero ninguno de los recientes daba semejante protagonismo a la religión en sus actos.
Trump controla a su gabinete por medio del miedo, en tanto AMLO a su vez tiene también amedrentado al suyo integrado por personajes que niegan a diario las evidencias más palpables.
Donald Trump ya no tendrá que preocuparse por construir y financiar su muro; México se ha erigido en él. Seremos la barrera entre los inmigrantes y un presidente que los presenta como una amenaza de seguridad nacional.
El conflicto migratorio —arancelario— que hoy enfrenta a México y Estados Unidos es consecuencia de muchos factores, pero a la cabeza de esas circunstancias están dos presidentes más interesados en quedar bien con su mercado electoral que con tomar decisiones de Estado.
"Las discusiones de inmigración en la Casa Blanca con representantes de México han terminado por hoy (miércoles). Hubo progreso, pero ni de cerca es lo suficiente!", tuiteó el mandatario estadounidense.