Wall Street cayó con fuerza, golpeado por las acciones de los bancos y las compañías de viajes, ya que nuevos temores sobre la propagación del coronavirus y su impacto económico se apoderaron de los inversores solo un día después de que unos resultados electorales impulsaron una recuperación.
Wall Street cayó con fuerza el martes en una volátil sesión, después de que la Reserva Federal sorprendió a los inversores con un recorte de medio punto porcentual en las tasas de interés, aumentando los temores sobre la magnitud del impacto del coronavirus sobre la economía.
El Promedio Industrial Dow Jones escaló más de un 5% el lunes, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq ganaron cada uno más de un 4%, en un importante rebote en Wall Street tras la fuerte caída de la semana pasada provocada por el temor al coronavirus.
América Latina era una de las pocas fichas de dominó que aún quedaban en pie ante el descalabro generalizado. Hasta el miércoles, cuando Brasil detectó el primer caso, Latinoamérica era una de las pocas regiones sin rastro de coronavirus en el tablero global.
El equipo del presidente respondió a la venta masiva de acciones en los mercados de valores estadounidenses, la más fuerte durante una semana en más de una década, con su conocida estrategia de evasión, minimizando la amenaza y repartiendo con entusiasmo la responsabilidad hacia los demócratas.
El S&P 500 cayó el viernes por séptimo día consecutivo en Wall Street y sufrió su mayor pérdida semanal desde la crisis financiera mundial de 2008, en medio de los crecientes temores de que el coronavirus podría llevar a la economía a una recesión.
Las acciones en China fueron de las primeras afectadas por los temores al brote de coronavirus, pero algunos inversores ahora apuestan a que pueden estar entre los primeras en recuperarse.
El pánico generado por el coronavirus provocaba un nuevo desplome de las bolsas mundiales, que se encaminaban a cerrar su peor semana desde la crisis global financiera de 2008 y sufrían una pérdida de valor por 5 billones de dólares.
El selectivo cotizado español sufre su peor semana desde 2010 lastrado por el miedo al impacto económico del coronavirus. Tras el golpe descomunal de ayer, el Ibex ha caído este viernes un 2,92% y se acerca a los 8,700 puntos.
Los tres índices de referencia de Wall Street se disponen a completar su peor semana desde que estalló la crisis financiera de 2008 debido a la creciente preocupación por el coronavirus.
Los principales índices de Wall Street cayeron el jueves por sexta sesión consecutiva, con el S&P 500 confirmando su corrección más rápida en la historia a medida que la propagación mundial del coronavirus aumenta la preocupación sobre el crecimiento económico.
Los índices bursátiles mundiales se sumían en la depresión este jueves, anulando la tímida estabilización de la víspera, en tanto la epidemia de coronavirus se extiende por todo el planeta.
El miedo inicial del mundo económico al coronavirus se ha convertido en pavor y ha dado el salto definitivo a América Latina. Las principales Bolsas de la región acumulan ya cuatro jornadas consecutivas a la baja —cinco en el caso de Brasil— por el temor a que la epidemia golpee...
La aversión al riesgo hundía el jueves a las bolsas del mundo, incrementando la pérdida de valor de mercado en apenas una semana a más de 3 billones de dólares, al tiempo que los retornos de los bonos estadounidenses tocaban pisos históricos por la rápida propagación del coronavirus fuera de China.
El índice S&P 500 de Wall Street cayó por quinta sesión consecutiva el miércoles, aunque su declive fue menos violento que en los últimos días, en medio de una sesión volátil ya que los inversores reaccionaban a las noticias sobre el coronavirus y analizaban su impacto en la economía.
Las acciones mundiales caían el miércoles por quinta jornada consecutiva, mientras que el oro volvía a acercarse a máximos de siete años después de que las autoridades sanitarias advirtieron de una posible pandemia de coronavirus.
Asia informó el miércoles de cientos de nuevos casos de coronavirus, incluyendo el primer soldado estadounidense infectado, mientras que Estados Unidos advirtió de una inevitable pandemia y los brotes en Italia e Irán se extendían a más países.
Los tres principales índices de Wall Street se hundieron el lunes, debido a que los inversores corrieron hacia activos más seguros tras un fuerte aumento de casos de coronavirus fuera de China que avivó temores a un impacto mayor de la epidemia en la economía global.
El virus ha llevado al gobierno chino a poner en cuarentena algunas grandes ciudades, afectando el tráfico aéreo al centro manufacturero del mundo e interrumpiendo las cadenas de suministros para todo: desde autos y repuestos a teléfonos inteligentes.
El miedo a la rápida propagación del coronavirus, más allá de China, y a sus repercusiones macroeconómicas para la ya frágil economía mundial, hundió este lunes a las principales bolsas europeas, empezando por la de Milán que perdió un 5,3%.
