Tras las elecciones en Estados Unidos y el triunfo electoral de Joe Biden, Cuba espera una relación “constructiva” y “respetuosa de las diferencias” con ese país, dijo el domingo el presidente Miguel Díaz-Canel.
La estrategia de la campaña del presidente Donald Trump de presentar una serie de demandas para impugnar el triunfo electoral de Joe Biden es más una manera de darle a Trump una salida en una derrota que sigue sin aceptar y no tanto un intento por cambiar el resultado de los comicios...
El presidente Nicolás Maduro expresó el domingo que aspira lograr mediante el diálogo una relación de respeto con el próximo gobierno de Joe Biden y afirmó que Donald Trump deja un campo minado entre Washington y Caracas que podría quedar en el olvido si Biden honra su compromiso con los...
Joe Biden indicó el domingo que planea actuar rápido en la creación de su equipo de gobierno, enfocándose en primera instancia en la pandemia de coronavirus, que posiblemente domine los primeros días de su gestión.
Entre los líderes mundiales que sin demora felicitaron a Joe Biden por su victoria en las elecciones de Estados Unidos hubo dos notables ausencias: los mandatarios de los dos países más grandes de América Latina, quienes son vistos como amigables con el presidente Donald Trump.
Kamala Harris hizo el sábado un reconocimiento a las mujeres, en particular las afroestadounidenses, que la apoyaron para que lograra romper las barreras que han permitido a los hombres, principalmente blancos, acaparar durante dos siglos los más altos cargos políticos en Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, nunca admite una derrota. Pero ahora afronta una difícil decisión tras la victoria electoral del demócrata Joe Biden: admitirlo con elegancia por el bien del país, o no hacerlo, pero ser expulsado de la Casa Blanca igualmente.
Pero el pasado de Biden como jefe del Comité de Relaciones Exteriores del Senado y como vicepresidente de la administración Obama le ha dado una familiaridad con los asuntos internacionales que podría funcionar a su favor, dicen los expertos en política exterior que lo conocen.
El sábado por la mañana, la caravana del presidente Trump acababa de llegar al Trump National Golf Club en los suburbios de Virginia cuando los medios de comunicación finalizaron sus días de espera y declararon que había perdido la presidencia ante Joseph R. Biden Jr.
“Para todos los que votaron por el presidente Trump, comprendo la decepción de esta noche”. “Yo también he perdido un par de veces. Pero ahora vamos a darnos una oportunidad. Es momento de hacer a un lado la retórica dura, de bajar la temperatura, de vernos otra vez, de volver a escucharnos”.
Al grito de “¡esto no ha terminado!” y “¡paren el robo!”, simpatizantes del presidente Trump protestaron frente a los capitolios estatales en el país, rehusándose a aceptar la derrota y reiterando las acusaciones sin fundamento del mandatario de que los demócratas ganaron mediante el fraude.
Fue el sábado, a las 11:25 a.m. , que The Associated Press declaró a Biden ganador. Fue en ese momento en que Biden se anotó el triunfo en su natal Pensilvania, pasando a su columna los 20 votos electorales de ese estado y superando el mínimo de 270 necesarios para obtener la presidencia.
Los que van armados son apenas una minoría, y no están haciendo nada ilegal, ya que las leyes en esos estados —Arizona, Nevada y Michigan— permiten el porte abierto de armas de fuego. No ha surgido reporte alguno de que alguien haya resultado lastimado.
Actualmente hay un caso electoral en la Corte Suprema e involucra una apelación presentada por los republicanos para excluir las boletas que llegaron después de la jornada electoral en Pensilvania. Pero si se terminan por contabilizar o no dichas papeletas parece ser irrelevante.
The Associated Press declaró ganador a Biden, quien llevaba una ventaja de 34.243 votos, al determinar que las boletas aún por contar no permitirían a Trump alcanzarlo. La agencia noticiosa ya había declarado la victoria de Biden en Michigan y Wisconsin.
En Manhattan, miles de personas salieron de sus viviendas, colmando las calles, bailando, gritando y chocando manos con desconocidos. En Louisville, Kentucky, la gente se reunía en los patios de sus casas y sacaron el champán. En Harlem, bailaron en las calles y sonaron campanas.
Ahora tendrá que gobernar con un Senado que podría quedar en manos republicanas, una Cámara de Representantes con menos aliados demócratas y una ciudadanía que incluye a unos 70 millones de habitantes hubieran preferido que Donald Trump siguiera siendo presidente.
Joe Biden promete llevar a Estados Unidos por un camino muy distinto al que ha transitado los últimos cuatro años bajo el gobierno de Donald Trump, en temas que van desde la pandemia de coronavirus y la atención médica hasta el cuidado al medio ambiente y la educación.
Kamala Harris pasó a la historia el sábado como la primera mujer negra elegida vicepresidente de Estados Unidos, rompiendo barreras que han permitido que hombres —en su mayoría blancos— ejerzan exclusivamente los puestos más altos de la política del país durante más de dos siglos.
En Roma, varias personas reunidas en una cafetería comenzaron a aplaudir una vez que los medios de comunicación dieron a conocer la noticia. Una funcionaria de la alcaldía de Berlín declaró: “Después del nacimiento de mi hijo, la elección de Joe Biden es, por mucho, la mejor noticia de este año”.
