Un grupo opositor también se concentró frente a la residencia presidencial de Olivos, suburbio al norte de la capital, donde más temprano se habían instalado manifestantes afines al gobierno, lo que obligó a la policía a montar un operativo para evitar disturbios.
En un clima de alta tensión y en medio de una pandemia, los dos candidatos punteros a la presidencia de Bolivia intensificaron sus campañas, a una semana de que se realicen unas elecciones con las que los bolivianos esperan zanjar la crisis que dividió al país tras la renuncia de Evo Morales.
El sondeo de opinión, realizado entre el 2 y 5 de octubre por un grupo de universidades y medios de comunicación, mostró que un 33,6% de los votantes respaldaría a Arce, el candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) que en septiembre obtuvo un respaldo de 40,3%.
El miércoles Mesa, líder de Comunidad Ciudadana (CC), habló en un encuentro con corresponsales de “construir escenarios de diálogo con todas las fuerzas políticas” para forjar un acuerdo nacional que permita al país encarar la crisis política, social y económica que agravó la pandemia.
“Hoy quiero presentar mi renuncia como embajadora, porque no estoy de acuerdo con la actual política de Relaciones Exteriores”, dijo Castro en una carta que hizo pública.
El expresidente boliviano Evo Morales dijo el miércoles que el exmandatario paraguayo Fernando Lugo será uno de los veedores que estará presente en las cruciales elecciones que se celebrarán el 18 de octubre en Bolivia, en las que su fuerza política aparece como favorita.
El candidato Luis Arce no asistió el domingo al segundo debate presidencial de Bolivia. Sin embargo, en la víspera el líder de las encuestas estuvo presente en el primero junto con los otros seis postulantes, tras 18 años sin un foro.
Las divisiones internas en el Gobierno interino de Bolivia llevaron a la salida del ministro de Economía del país y otros dos ministros del gabinete el lunes, lo que avivó la incertidumbre sobre una recuperación económica del país andino golpeado por la pandemia de coronavirus.
“El próximo gobierno enfrentará probablemente la crisis más dramática de Bolivia en el último siglo... las heridas dejadas por Evo Morales no se han restañado y hay que ir a una reconciliación”, dijo Mesa, quien fue presidente entre 2003 y 2005 en otra transición difícil.
Un diputado oficialista fue suspendido este jueves por conducta indecorosa con una mujer durante una sesión virtual en el Congreso de Argentina.
Bolivia avanza hacia un polarizado duelo electoral entre el candidato izquierdista Luis Arce, delfín de Evo Morales, y el expresidente Carlos Mesa, luego de que la mandataria derechista, Jeanine Áñez, abandonara la contienda a un mes de los comicios.
La mandataria dijo en un discurso pregrabado ante la Asamblea General de Naciones Unidas que quería denunciar “el acoso sistemático y abusivo que ejerce, desde Argentina, el gobierno kirchnerista, contra las instituciones y contra los valores republicanos en Bolivia”.
América Latina hizo el martes una encendida defensa del multilateralismo de las Naciones Unidas poco después de que Donald Trump exhortase a los países a velar primero por sus propios intereses y después pensar en los demás.
En plena carrera electoral por la silla presidencial de Bolivia, la mandataria interina Jeanine Áñez sorpresivamente declinó el jueves su candidatura para los comicios del 18 de octubre tras hacer un llamado a la unidad para hacerle frente al partido del expresidente Evo Morales
El analista económico y profesor de la estatal Universidad Mayor de San Andrés, Alberto Bonadona, dijo a The Associated Press que el país está “en plena crisis, en una recesión” y que las medidas que se están implementando no son las mejores.
La organización internacional Human Rights Watch calificó de infundada y política la acusación de terrorismo contra el expresidente Evo Morales y pidió que se retiren los cargos en su contra, declaración que fue rechazada por el gobierno boliviano.
Después de 14 años al frente del gobierno, Morales renunció el 10 de noviembre por presiones de las fuerzas armadas y la policía durante protestas y disturbios generalizados en medio de acusaciones de que intentaba reelegirse en forma fraudulenta. Entonces se exilió en México y después en Argentina
La Unión Europea se comprometió el martes a apoyar con más de dos millones de dólares la realización de las elecciones en Bolivia y anunció que enviará una delegación de observadores —cinco a seis expertos— para elaborar un análisis integral del proceso del 18 de octubre.
El expresidente boliviano Evo Morales perdió una batalla legal para ser candidato a senador en las elecciones del 18 de octubre, luego de que un Tribunal de Justicia de primera instancia inhabilitara el lunes su postulación por la región central de Cochabamba en medio de protestas en su contra.
“La historia demuestra que podrán inhabilitar a Evo pero no podrán proscribir al pueblo”, escribió. En un mensaje previo dijo que la decisión se tomo “bajo amenazas y presiones de procesos” al juez y considera que es “política e ilegal”.
