Como medidas excepcionales para Nochebuena y Navidad, así como para Nochevieja y Año Nuevo, también se exigirá una prueba diagnóstica con resultado negativo para entrar a los restaurantes y a las celebraciones públicas de fin de año.
"La situación es grave en este momento", aseguró a Efe el presidente de la Asociación Nacional de Restaurantes (Pro.var) lusa, Daniel Serra, que alertó de que la gran mayoría de las comidas y cenas que las empresas organizan en estas fechas se están cancelando.
Mientras que países como Portugal y España han vacunado a la gran mayoría de su población, otros países van muy rezagados. Bulgaria, por ejemplo, tiene apenas un 26,6% de población totalmente inmunizada, según el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades.
El primer ministro de Portugal dijo que tiene previsto mantener los estrictos controles fronterizos por el COVID-19 más allá del 9 de enero, cuando estaba previsto que finalizasen, ante la amenaza de la variante ómicron, altamente infecciosa.
Líderes de la Unión Europea trataban de coordinar el jueves medidas contra el auge de contagios de coronavirus en el continente y la expansión de la nueva variante ómicron, al tiempo que mantenían las fronteras abiertas.
Alrededor del 77% de la población italiana cuenta con dos dosis de la vacuna , y la campaña se amplía a partir del miércoles a los niños de 5 a 11 años. Las vacunas de refuerzo están disponibles para cualquier persona de 18 años o más, cinco meses después de la segunda dosis.
En un informe interno filtrado el miércoles, un panel de expertos que asesora a las autoridades sanitarias advirtió contra la “seguridad falsa” que representarían los certificados de salud en un país en el que casi el 90% de todas las personas habilitadas para vacunarse lo han hecho.
Las autoridades de salud de Portugal confirmaron cinco casos más de la nueva variante ómicron del coronavirus el jueves, lo que aumenta el total a 19, todos ellos relacionados con un club de fútbol de Lisboa.
Los que no presentan una prueba negativa deberán pagar multas de entre 300 y 800 euros (340 y 910 dólares). Las aerolíneas que trasporten pasajeros sin pruebas podrían pagar multas de 20,000 euros (22,600 dólares) por persona, y en caso de reincidencia podrían perder su licencia.
El gobierno suizo informó que a partir del miércoles los viajeros que lleguen de Canadá, Japón, Níger y Portugal deberán presentar una prueba de COVID-19 negativa y someterse a una cuarentena de 10 días.
Además, la variante ha proporcionado una prueba más de lo que los expertos han estado diciendo durante mucho tiempo: que ningún continente estará a salvo hasta que todo el mundo esté lo suficientemente vacunado. Cuanto más se permite que el virus se propague, más oportunidades tiene de mutar.
Los ministros de Sanidad del G-7, actualmente bajo la presidencia del Reino Unido, han señalado que “la comunidad global” se enfrenta a “la amenaza de una nueva y altamente transmisible variante de la covid-19, que exige una acción urgente”.
La Dirección General de Salud reportó el jueves 3.150 casos nuevos, con 691 personas en el hospital, 103 en unidades de cuidados intensivos y 15 muertes. El número de pacientes que requirieron hospitalización fue el más alto desde septiembre.
La Dirección General de Salud reportó el miércoles 3.773 casos nuevos, con 681 en hospitales, 105 en unidades de cuidados intensivos y 17 muertes. El número de pacientes que requirieron hospitalización fue el más alto desde septiembre.
Sin embargo, son posibles nuevas restricciones a las reuniones y reglas sobre el uso de mascarillas. Las vacunas para el coronavirus son eficaces para prevenir enfermedad severa, pero no frenan las infecciones.
Santa Claus no tendrá su tradicional bienvenida en la ciudad holandesa de Utrecht este año. El jefe de ceremonias del Carnaval de Colonia, Alemania, tuvo que renunciar tras dar positivo al coronavirus. Y Austria, que sufre uno de los brotes más graves en la región, está valorando decretar un...
En una abarrotada Unidad de Cuidados Intensivos para pacientes de coronavirus en la capital de Rumanía, Bucarest, Adrian Pica, de 55 años, se sienta en su cama mientras recibe oxígeno suplementario para ayudarle a respirar. “No quería vacunarme porque tenía miedo”, dijo.
Portugal preparaba el martes la disolución de la unidad bajo mando militar que gestionó las vacunaciones contra el COVID-19, después de casi alcanzar su objetivo de que el 85% de la población completara su vacunación.
Mientras Portugal se acerca a su objetivo de que el 85% de la población haya completado su vacunación contra el COVID-19 en nueve meses, otros países dentro y fuera de Europa quieren saber cómo se logró.
Hasta ahora se han inyectado 6,000 millones de dosis anticovid-19, pero persisten desigualdades en el acceso a las vacunas, pues mientras unos 15 países ya administran terceras dosis, la vacunación no despega en los países pobres, en particular en África.
