Reportajes
Se vacunaron y se quedarán con la mascarilla puesta, quizá para siempre
Cada vez que Joe Glickman sale a comprar víveres, se pone una mascarilla N95 en el rostro y un cubrebocas de tela encima. Luego, se pone un par de gafas protectoras. Ha seguido este protocolo de seguridad durante los últimos 14 meses y no lo modificó después de contagiarse de coronavirus...