El sexto y último satélite de las Fuerzas Amadas de Estados Unidos para la detección temprana de misiles fue lanzado con éxito este jueves desde una plataforma de Cabo Cañaveral, en Florida (EU).
Rusia se retirará de la Estación Espacial Internacional después de 2024 y se centrará en construir su propia base orbital, anunció el martes el nuevo jefe de la agencia espacial del país.
El acuerdo sobre vuelos cruzados entre la agencia espacial rusa Roscomos y la estadounidense NASA presupone el envío de cosmonautas rusos a la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de tres naves estadounidenses Crew Dragon, según informó hoy el cosmonauta ruso Oleg Kononenko.
"Un lanzamiento a fines de septiembre permitirá a SpaceX completar el procesamiento de hardware", explicó la NASA en un comunicado, en el que agregó que los equipos de la misión continuarán revisando la fecha de lanzamiento en función del cronograma de llegada de naves a la estación espacial.
La NASA explicó que el acuerdo “garantizará operaciones seguras continuas” de la estación espacial y protegerá a quienes viven a bordo. En este momento hay siete personas allá: tres estadounidenses y un italiano que volaron con SpaceX y tres rusos que llegaron en una Soyuz.
El astronauta de la NASA y coronel de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos Terry Virts pide a la humanidad que "cuide el planeta Tierra, nuestro hogar", porque los humanos nunca podrán habitar en Marte, aunque se viva ahora "una época dorada de exploración espacial, gracias a la inversión privada".
La alusión a SpaceX y a Elon Musk es evidente. Pero en el capítulo quinto —atención, spoiler hasta el siguiente párrafo—, cuando parece que es irremediable que el primer amartizaje lo protagonice la nave corporativa, un giro imprevisto de la meteorología provoca que lo haga la de la NASA.
Después de alcanzar su órbita operativa, los satélites ingresarán al servicio comercial y comenzarán a transmitir señales de banda ancha a los consumidores, quienes pueden comprar el servicio Starlink y conectarse a la red con una terminal terrestre provista por SpaceX.
Cual concierto del grupo favorito por el que se ha esperado por más de un año, imaginamos que ya debe haber alguno que otro fanático de Apple acampando a las afueras de las tiendas de Apple para hacerse este viernes del nuevo MacBook Pro de 13 pulgadas.
"Los datos de EMIT permitirán a los científicos crear un nuevo mapa mineral de las regiones secas y productoras de polvo de la Tierra, que proporcionará información sobre los efectos regionales y globales de calentamiento y enfriamiento del polvo mineral", indicó la agencia espacial.
Con un 60 % de condiciones climáticas a favor, el satélite NILESAT-301 despegó a bordo del potente cohete Falcon 9, de SpaceX, desde la desde la Estación de la Fuerza Espacial estadounidense de Cabo Cañaveral, en la costa este de Florida.
Musk tuiteó en respuesta "¡Gracias, señor presidente!", e incluyó un enlace que hacía referencia a la adjudicación por parte de la NASA, en abril de 2021, de un contrato de 2,900 millones de dólares a su empresa espacial, SpaceX, para construir una nave que lleve astronautas a la Luna.
Echazarreta, de 26 años, viaja junto a otros cinco tripulantes, todos hombres, entre ellos el ingeniero brasileño Víctor Correa Hespanha. El cohete espacial, que es reutilizable, ha sido bautizado como New Shepard en honor a Alan Shepard, el primer estadounidense en el espacio.
El vuelo, además, se suma a los esfuerzos de Blue Origin, una empresa del fundador de Amazon Jeff Bezos, para competir contra SpaceX de Elon Musk y Virgin Galactic de Richard Branson por los dólares del turismo espacial.
Las ventajas de la base de Alcántara fueron presentadas al empresario por el propio comandante de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), brigadier Carlos de Almeida Baptista Junior, quien acudió a la reunión que Musk tuvo el pasado viernes en Sao Paulo con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro.
La cápsula con las cenizas de Yanes formará parte de un satélite de comunicaciones que será colocado en la órbita terrestre baja y estará dando vueltas al planeta por casi una década hasta que reingrese en la atmósfera de la Tierra y se convierta en una estela de luz, como una estrella fugaz.
Al igual que SpaceX, la firma del multimillonario Elon Musk, Boeing tiene un contrato de más de 4,200 millones de dólares con la NASA para encargarse del traslado de ida y vuelta de astronautas y equipos a la EEI despegando desde suelo estadounidense.
La cápsula no tripulada CST-100 Starliner despegará montada encima de un cohete Atlas V a las 18.54 horas de este jueves (22.54 GMT) desde el Complejo-41 de la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, como parte del programa de Tripulación Comercial que desarrolla la NASA.
"Es un paso crítico para nosotros", dijo hoy en la conferencia Steve Stich, gerente en el Programa de Tripulación Comercial de la NASA, respecto a la misión y sobre la que expresó su confianza de que se convertirá en el comienzo de una serie de viajes regulares hechos por la compañía privada.
Los cinco nanosatélites que viajarán el próximo 7 de junio formarán parte de la misión de abastecimiento a la EEI número 25 de SpaceX para la NASA, en virtud de un contrato adjudicado a la compañía fundada por Elon Musk para el transporte de carga y tripulación hacia y desde el laboratorio orbital.
