Internacional - Finanzas
Argentina crea nuevo tipo de cambio para economías provinciales
(Bloomberg) -- El Gobierno argentino está redoblando su complicada estrategia monetaria para impulsar las exportaciones, agregando un nuevo tipo de cambio temporal.
La nueva tasa se aplicará a los exportadores de las provincias más pequeñas de Argentina fuera de Buenos Aires que participen en un programa de control de precios, dijo el lunes el ministro de Economía, Sergio Massa. También establece que los Gobiernos provinciales medien en los contratos entre exportadores y productores para garantizar la disponibilidad interna de productos.
Si bien la anuncio careció de detalles sobre la tasa que recibirán los exportadores o los productos que abarca, en respuesta a una consulta, un funcionario del ministerio dijo que Massa anunciaría el tamaño exacto y el alcance de la medida en los próximos días.
Argentina, que mantiene controles de capital desde 2019, tiene una letanía de tipos de cambio informales para ciertas actividades, desde viajes al extranjero y grandes conciertos de música hasta transacciones financieras. En septiembre, Massa permitió a los exportadores de soja acceder a un tipo de cambio más débil durante algunas semanas, lo que impulsó la entrada de dólares, pero también inyectó más pesos a la economía en un momento en que la demanda es baja y la inflación se acerca al 100%.
Así como el Gobierno ha apoyado a otras cadenas de valor, las economías regionales “van a acceder a un tipo de cambio diferencial para impulsar las exportaciones”, dijo Massa, hablando en una viña en la provincia de Mendoza.
La nueva tasa estará vigente entre el 20 de noviembre y el 30 de diciembre, agregó. Massa también anunció líneas de crédito y aplazamientos del pago de impuestos para los agricultores afectados por el agravamiento de la sequía.
Problemas cambiarios
El tipo de cambio oficial de Argentina está controlado por el Gobierno mediante una combinación de controles de capital, congelación de precios y restricciones a las importaciones. Ese marco ha creado una brecha entre la tasa oficial y todas las informales. Massa y otros funcionarios se oponen a la medida convencional de una fuerte devaluación de la moneda, argumentando que afectaría a los argentinos más pobres.
Esta última medida corre el riesgo de crear fricciones para el programa de US$44,000 millones de Argentina con el Fondo Monetario Internacional. El equipo técnico del FMI, que evalúa la evolución del programa cada trimestre, tuvo que aprobar una exención para Argentina en octubre porque el tipo de cambio temporal para los exportadores de soja violaba las reglas del organismo. El lunes, Massa comparó el próximo tipo de cambio con el de las exportaciones de soja.
Una portavoz del FMI no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
aranza
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