Internacional - Seguridad y Justicia
Rusia lanza bombardeo aéreo récord contra Ucrania
(Bloomberg) -- Fuerzas rusas atacaron Ucrania con el bombardeo con misiles y drones más grande de los 22 meses de invasión, que dejó al menos 12 muertos, días después de que Moscú culpara a Kiev por un ataque a un barco militar en Crimea.
“Sin duda responderemos a los ataques terroristas”, declaró el presidente Volodímir Zelenski en X, antes Twitter. El líder ucraniano señaló que Rusia había atacado objetivos desde Járkov, en el noreste, hasta Leópolis, en el extremo occidental.
La defensa antiaérea ucraniana derribó 114 de 158 objetivos aéreos durante la noche del viernes, según dijo a Telegram el comandante en jefe ucraniano, el general Valerii Zaluzhnyi. El ataque involucró más de 120 misiles, señaló, 87 de los cuales fueron derribados.
El ataque más reciente, aunque de escala un poco menor, ocurrió en noviembre de 2022, cuando Rusia disparó casi 100 misiles como parte de sus reiterados intentos por dañar la infraestructura energética del país. A diferencia de esos ataques, el actual parecía apuntar principalmente a objetivos civiles —como escuelas, tiendas y un hospital de maternidad— y se reportaron pocos daños a la red eléctrica del país.
Además de las víctimas fatales, más de 75 personas resultaron heridas en todo el país, según informó el Ministerio del Interior ucraniano en Telegram. Los esfuerzos de recuperación continúan.
Al menos una persona murió y 21 resultaron heridas en la capital, Kiev, señaló la administración militar de la ciudad en Telegram. El ataque dañó un depósito y al menos un edificio de apartamentos, así como el edificio de una estación de metro utilizada como refugio antiaéreo.
El bombardeo se produjo tres días después de que Rusia informara que uno de sus barcos en Crimea había resultado dañado por un ataque ucraniano con misiles. La guerra se acerca a los dos años, y Kiev ha intensificado sus ataques contra la marina de Moscú, que se utilizó para atacar ciudades ucranianas y paralizar la navegación en el mar Negro.
Pocas horas después del ataque ucraniano en Feodosia, Crimea, el Kremlin informó que el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, había comunicado al presidente Vladímir Putin de los daños al gran buque de desembarco.
Contraofensiva estancada
En los últimos meses, la contraofensiva ucraniana en el este y sureste del país ha tenido dificultades para avanzar, ya que se enfrenta a defensas rusas fuertemente fortificadas y se ve obstaculizada por una escasez de armamento avanzado.
Más allá de la necesidad de armamento, Ucrania suplicó a los donantes extranjeros enviar ayuda urgentemente, afirmando que se enfrenta a una “incertidumbre excepcionalmente alta” sobre las necesidades presupuestarias básicas de cara a 2024.
Los ataques nocturnos causaron muertos, heridos y daños en varias ciudades importantes. Además de Leópolis y Járkov, las fuerzas del Kremlin atacaron, entre otras, la ciudad central de Dnipró y Odesa, en la costa ucraniana del mar Negro.
Rusia utilizó casi todos los tipos de armas aéreas de su arsenal, dijo Yurii Ihnat, portavoz de la Fuerza Aérea, desde misiles hipersónicos Kinzhal hasta misiles de crucero y drones.
“Hacía mucho tiempo que no veíamos tanto rojo en nuestros monitores. En todas las regiones, en todas direcciones”, afirmó Ihnat.
La caída de restos de misiles y drones derribados dañó algunas líneas eléctricas locales, lo que provocó interrupciones limitadas en el suministro eléctrico en las regiones Kiev, Dnipró y Odesa, dijo el Ministerio de Energía en Telegram.
aranza
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