El Pez Muere por la Boca
Más discurso que empleo
Carlos Fernández-Vega, La Jornada
Pues nada, que el desempeño de la "presidencia del empleo" y la carabina de Ambrosio resulta más o menos lo mismo y, al igual que en el pasado inmediato, a mayor número de discursos, menor número de fuentes de ocupación.
El INEGI divulgó su encuesta nacional de ocupación y empleo al cierre del primer trimestre de 2007, y entre sus resultados destaca el siguiente: oficialmente en dicho periodo la población desocupada en el país fue de 1.7 millones de personas, o lo que es lo mismos, 4 por ciento de la población económicamente activa, una proporción superior al 3.5 por ciento registrado en igual lapso de 2006 y al 3.6 por ciento reportado para el cuarto trimestre de ese mismo año. La tasa de desocupación es más alta en las localidades grandes, donde está más organizado el mercado de trabajo; es así que en las zonas más urbanizadas con 100 mil y más habitantes la tasa es de 4.7 por ciento; en las de 15 mil a menos de 100 mil habitantes de 3.9 por ciento; en las de 2 mil 500 a menos de 15 mil de 3.3 por ciento y en las rurales de menos de 2 mil 500 habitantes de 2.3 por ciento.
En el discurso oficial no dejan de sonar las fanfarrias por "las cifras positivas" que se reportan en materia de generación de empleo pero, como se hizo costumbre a lo largo del sexenio foxista, dicho discurso se aleja cada día más de la realidad, o a la inversa. A la "continuidad", como al "cambio" le gustan las cifras alegres, y en el regocijo sólo suma y "olvida" restar.
Allá por marzo pasado el inquilino de Los Pinos festejaba que ese "fue uno de los meses en que se generó el mayor número de empleos formales en el país", pero dejó a un lado los que se cancelaron, de tal suerte que en el balance la realidad, una vez más, se impuso. En resumen, de foxilandia hemos pasado a calderolandia, y en paralelo el problema real crece cotidianamente.
Mientras la "presidencia del empleo" da resultados virtuales, otros aspectos relevantes del informe del INEGI son los siguientes: al considerar la población ocupada en relación con el sector económico en el que labora, en el primer trimestre de 2007, 5.7 millones de personas (13.5 por ciento del total) laboró en el sector primario, 11.1 millones (26.1 por ciento) en el secundario o industrial y 25.3 millones (59.7 por ciento) están en el terciario o de los servicios. El restante 0.7 por ciento no especificó su actividad económica.
Población subocupada
Durante enero-marzo de 2007 la población subocupada en el país sumó 3.3 millones de personas, habiéndose incrementado este monto en 691 mil personas en relación con el total cuantificado en el mismo periodo de un año antes. La presencia de la subocupación es mayor en el sector primario, donde 10 de cada 100 personas están en esa situación, mientras que en los sectores secundario y terciario es de ocho y de siete, respectivamente.
En el sector informal de la economía laboran 11.4 millones de mexicanos, 26.9 por ciento de la población ocupada, monto cada vez más cercano al empleo formal registrado en el IMSS, el cual, al cierre de marzo, sumó 14.7 millones de plazas entre eventuales y permanentes.
Al primer trimestre de 2007 la población ocupada sumó 42.4 millones de personas (26.6 millones son hombres y 15.8 millones mujeres), siendo 679 mil más que en el mismo trimestre de 2006, cuando se ubicó en 41.7 millones de personas. Poco más de la mitad de la población ocupada (52.9 por ciento) se concentra en las ciudades más grandes del país (de 100 mil y más habitantes); le siguen las localidades rurales (menores de 2 mil 500 habitantes) donde se agrupa 19.6 por ciento de la población ocupada total; los asentamientos que tienen entre 15 mil y menos de 100 mil habitantes (urbano medio) albergan 14.4 por ciento y, finalmente, el resto de los ocupados (13.1 por ciento) reside en localidades de 2 mil 500 a menos de 15 mil habitantes (urbano bajo).
Por lo que toca a la población económicamente activa, el informe del INEGI revela que en el periodo de referencia sumó 44.1 millones, contra 43.2 millones en el año previo. Setenta y ocho de cada 100 hombres son económicamente activos, y 41 de cada 100 mujeres.
De acuerdo con el INEGI, las entidades de la República que durante el primer trimestre de 2007 registraron las tasas de desocupación más altas fueron Coahuila (6.5 por ciento), estado de México (5.9), Distrito Federal (5.7), Aguascalientes (5.6) y Nuevo León (5). Las de menor tasa, Guerrero (1.1 por ciento), Baja California Sur y Yucatán (1.9).
AAG
