Internacional - Política

Merkel insta a sus filas a la disciplina ante "inaceptables" excesos verbales

2010-06-13

La propia Merkel muestra en su entrevista al dominical su admiración por Gauck, al que...

Berlín, (EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, llamó hoy a la disciplina a su coalición de gobierno, ante los reticentes disensos internos y también los excesos verbales generados en algunas tumultuosas reuniones de gabinete.

"Tenemos que desarmarnos en cuanto a las formas en la coalición", afirma Merkel, en declaraciones al dominical "Bild am Sonntag", para añadir que "debemos ofrecer seguridad al ciudadano en estos tiempos difíciles. Sólo así recuperaremos su confianza".

La canciller califica de inaceptables los insultos que saltaron en la reunión que abordó el paquete de ahorro de su gobierno, que según los medios incluyeron términos como "jabalina" (o cerda salvaje) y "tropa de pepinillos", sin concretar el destinatario.

"Parto de la base de que los participantes han entendido que tal estilo no es aceptable. No puede ni va a crear escuela", asegura.

La canciller sale así al paso tanto a los disensos recurrentes en su coalición, integrada por la Unión Cristianodemócrata (CDU), la Unión Cristianosocial de Baviera (CSU) y el Partido Liberal (FDP).

Los desacuerdos abarcan desde el ámbito fiscal y la reforma sanitaria, motivo de fricciones desde el inicio de la legislatura, siete meses atrás, a la revisión del calendario para el apagón nuclear y, más recientemente, la reforma del Ejército.

Un portavoz del Ministerio de Defensa desmintió ayer unas informaciones del prestigioso "Frankfurter Allgemeine" en que se aseguraba que el titular, Karl-Theodor zu Guttenberg, el ministro más popular del gobierno, se hubiera planteado dimitir a raíz de la tumultuosa reunión del Ejecutivo.

Guttenberg tuvo que oír algunos improperios de esa reunión y además siente cuestionado, tanto en su propósito de suprimir el servicio militar, como en relación a un informe de Cancilleía sobre unos bombardeos de Kunduz (norte de Afganistán) de septiembre de 2009, en que murieron 142 personas, en su mayoría civiles.

A las tensiones de la coalición respondió el jefe del grupo parlamentario socialdemócrata, Frank-Walter Steinmeier, apremiando a convocar elecciones anticipadas por la debilidad del gobierno.

"Este gobierno ha fracasado y el camino más limpio sería la convocatoria de elecciones anticipadas", afirmó el actual líder de la oposición, vicecanciller y ministro de Exteriores de Merkel en la anterior legislatura, en declaraciones publicadas ayer por "Bild".

Según una encuesta de la televisión pública ARD, un 53 por ciento de los alemanes cree que la alianza de Merkel se romperá prematuramente, frente al 40 que cree aguantará toda la legislatura.

La prueba de fuego para Merkel, tras la aprobación del mayor paquete de ahorro de la historia de la RFA -80,000 millones de euros hasta 2014-, podría ser la elección presidencial, el 30 de junio.

El candidato de su coalición, el primer ministro de Baja Sajonia, Christian Wulff, tiene teóricamente la mayoría numérica en la Asamblea Federal, órgano al que compete la elección.

Pero podrían escapársele votos hacia el carismático aspirante presentado por la oposición socialdemócrata-verde, el ex disidente de la Alemania comunista y responsable de la custodia de los archivos de la Stasi tras la caída del Muro, Joachim Gauck.

La propia Merkel muestra en su entrevista al dominical su admiración por Gauck, al que califica de "extraordinaria personalidad", pero defiende a Wulff como líder con mayor experiencia en el quehacer político.

De haber elección directa, un 40 por ciento de los ciudadanos se decantaría por Gauck, frente al 31 que lo haría por Wulff, según una encuesta de la ARD.



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