Cartas Abiertas

Carta con claves

2010-09-14

Lo único cierto es que nadie sabe, nadie supo, respecto a la situación actual del...

Julio Hernández López, La Jornada

El inseguro escenario de las celebraciones burocráticas de la Independencia nacional fue cargado ayer con un elemento más de turbiedad y elucubraciones cuando, con un inexplicado sentido de la oportunidad conmemorativa, fue actualizado el recuerdo de que uno de los más connotados miembros de la elite derechista nacional permanece secuestrado y que el desenlace del episodio puede ser fúnebre. Por la misma vía de correo electrónico utilizada cuando dieron a conocer su primer comunicado con fotografía del cautivo, los autodenominados Misteriosos Desaparecedores enviaron un nuevo texto que entre manejos verbales presuntamente ingeniosos o desparpajados pareciera filtrar una de dos posibilidades: que para hablar hoy del ex candidato presidencial panista debe utilizarse el tiempo pasado, o que mediante este artificio epistolar de Internet los secuestradores pretenden acelerar el pago de un rescate por parte de familiares y amigos del político queretano que, según la versión de los captores, lo habrían abandonado.

El tercer boletín de prensa de los MD fue acompañado de una fotografía de Diego Fernández de Cevallos en condiciones similares a las antes difundidas, como si se tratara de una imagen tomada exactamente el mismo día, aunque con algunos detalles distintos. Esta vez, por ejemplo, el privilegiado político de barba tiene en sus manos un ejemplar de la revista Proceso, de mayo del presente año, abierta en la página en que fue publicado un reportaje de Carlos Acosta, http://bit.ly/aQ2DL1, "Diego y sus millonarios litigios con el poder del poder".

Algo parecieran indicar la fotografía y el reportaje seleccionados para esta ocasión, aun cuando las palabras usadas por los Misteriosos Desaparecedores en su nueva incursión pública parezcan decididas a no dar pista sobre los motivos reales del secuestro, jugando con la enumeración de las causas que han sido mencionadas en distintos ámbitos, aunque a fin de cuentas reduciéndolas a tres, lo que finalmente tampoco dice nada: narcotráfico, guerrilla o "algún grupo poderoso del gobierno". La fotografía utilizada en el reportaje de Carlos Acosta fue tomada de la revista Caras, de Televisa, y muestra cercanos, sonrientes y de corbata de moño a Diego Fernández de Cevallos y a Carlos Salinas de Gortari, éste con expresión de complacida picardía y el primero con aires de acompañamiento feliz en la jugarreta o broma que el Jefe de Jefes estaría haciendo en presencia del solamente Jefe.

Podría ser, desde luego, que el acento de los MD estuviera no en la imagen sino en el texto, y éste describe con detalle algunos de los negocios hechos por Diego al amparo del poder, en abierta utilización de influencia política para la obtención de jugosos –y no sólo por Jugos del Valle– triunfos jurídicos. Pero también se menciona allí la sabida animadversión de los Calderón Hinojosa hacia el comportamiento profesional de su compañero de partido, sobre todo en relación con el caso Ramos Millán, cuyo desenlace significó para el Estado mexicano el pago de más de mil 200 millones de pesos que, en 2002, significaban más de lo presupuestado para el ejercicio de la Secretaría de la Reforma Agraria. El diputado Felipe dijo entonces que aun cuando el Estado tuviera dinero para pagarles a los clientes de Diego, quien obviamente se llevaría una gran tajada a título de honorarios profesionales, debería jerarquizarse ese cumplimiento "de acuerdo no sólo con criterios jurídicos o políticos, sino éticos". La senadora Luisa María, hermana de Felipe, junto con otros panistas, promovió una iniciativa de reformas al artículo 62 constitucional para "acotar" en legisladores que al mismo tiempo fuesen litigantes activos "la tentación de abusar de su posición de poder para sacar ganancias personales". Con el respaldo del PRI, esa iniciativa fue congelada.

Desmonta riesgos de derrota el candidato de Salinas de Gortari a la sucesión presidencial que no quiere soltar a otro partido el bélico Calderón. Amenazado por las anunciadas alianzas interpartidistas que desde Toluca pretenden cerrarle el paso a Los Pinos, Enrique Peña Nieto ha movido sus piezas legislativas locales para impedir las candidaturas comunes a gobernador y para establecer otras medidas electorales favorables a su proyecto. Dueño del tablero estatal, el Jefe Quique va secuestrando las posibilidades de que le echen montón en 2011 a la hora de la sucesión y con ello traten de empañar su salinizado trayecto televisivo rumbo a la Presidencia de la República.

Lo único cierto es que nadie sabe, nadie supo, respecto a la situación actual del llamado jefe Diego, de las motivaciones de quienes lo secuestraron, y del momento y condiciones en que se dará el grito informativo del desenlace. Sólo es posible tomar nota de que hoy, enmedio de la oscuridad y el temor, el caso del secuestro más impactante de México ha vuelto a ser actualizado, en un mensaje con claves políticas.

Astillas

Vaya historia del diputado inglés Mike Weatherley, uno de los "nuevos rostros conservadores", cuya conducta había sido puesta de ejemplo para crear la Big Society buscada por el primer ministro británico, David Cameron. Weatherley, de 53, se casó siete años atrás con la brasileña Carla Adriana, quien desde entonces ejercía la prostitución, aunque el ahora esposo acabó enterándose apenas este domingo al leer The Sunday Mirror. Carla Adriana posó para fotografías junto a su cónyuge en campaña electoral, mientras éste advertía que su carrera se distinguiría por "sus logros políticos y no por sus meteduras de pata", siempre en busca de consolidarse como "un pilar" de su comunidad y, según el diario El País, http://bit.ly/d6GCEF, de donde se toma la presente información, era descrito por sus compañeros de partido como "un ejemplo de la nueva hornada de conservadores modernos con fuertes valores familiares". Un reportero ubicó a Carla Adriana en un "salón de masajes" del sur de Londres y escribió un reportaje que hizo a Mike expresar: "Gracias por dármelo a conocer"...

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iliana